El comandante del Cuerpo de Bomberos de Valparaíso, Rodrigo Romo, informó que Bomberos tiene distintos procedimientos para enfrentar eventuales emergencias en el actual contexto sanitario debido a la presencia del coronavirus.

"Estamos en constante comunicación con Bomberos del extranjero, quienes nos han transmitido diversas informaciones. Es por eso que nosotros tenemos todo un sistema de seguridad y protección para los voluntarios, desde cómo tienen que operar, cuáles son las medidas de seguridad, el trabajo en conjunto con el Samu, etc.", afirmó el comandante.

Dotación mínima

En ese aspecto, Romo añadió que además del sistema de seguridad en que ya se trabajó, cada Compañía ha tomado sus medidas, como generar turnos con dotaciones mínimas, donde los voluntarios que no están de turno tienen prohibido ingresar al cuartel, y en el caso de que haya un incendio, los voluntario se van activando en forma escalonada.

"Hoy día estamos considerando todo lo que evite el contagio entre nosotros, porque creemos que en algún minutos, si es que el sistema llegara a colapsar, nosotros vamos a ser pilares para el apoyo al Samu y al sistema de salud", enfatizó el jefe del Cuerpo de Bomberos porteño.

Por otro lado, si bien en estos momentos hay dotaciones mínimas en los cuarteles de Bomberos, todas las Compañías tienen una dotación de voluntarios, la que se va renovando durante el día, y los turnos no se cruzan entre unos y otros.

Sanitización

A lo anterior se suman otras medidas de sanitización de cuarteles y carros. "Entre cada turno se van sanitizando los cuarteles, al igual que los carros bomba después de alguna emergencia relacionada con el virus, pero eso todavía no ha ocurrido, entonces estamos a la espera y preparados por si llegara a ocurrir", destacó Romo.

Cuarentena

Por otro lado, el comandante Rodrigo Romo enfatizó en la importancia de aplicar cuarentena obligatoria para controlar la propagación del coronavirus en la población.

"Yo he estado en contacto con Bomberos de Francia, Italia y Estados Unidos, y por lo que ellos me transmiten creo que es necesario por un tema de disminuir los riesgos y que los sistemas de salud están colapsando, y se supone que son de países desarrollados. Entonces, si en Europa están colapsando creo que aquí se deberían tomar las medidas para evitar eso".

Finalmente, Romo hace un llamado a la consciencia de la gente para evitar todo tipo de riesgo, ya sea por accidente o manipulación de fuego en sus hogares.

Nicole Valverde S.

Ayer se hizo viral en redes sociales el video de un conductor de trolebús que hizo una pausa en su recorrido para llamar la atención de un grupo de personas, en su mayoría adultos mayores, que estaban aglomerados haciendo fila afuera del Servipag ubicado calle Prat, en el Wall Street porteño.

El registro lo hizo el mismo conductor, y se oye que les recrimina a las personas: "Oigan, ¿por qué no se organizan?. ¡Tienen que ir a dos metros de distancia cada uno, por favor!".

Ante la repuesta negativa y murmullos de la gente, el conductor prosigue: "Oye, ¿han visto las noticias?. ¡Mi familia está en Italia y se está muriendo todos por la desobediencia, hombre!. ¿Cómo no van a tener consciencia?. Si tienen miedo que alguien se les cole, ahí está la autoridad (apunta a un marino) hay Estado de Excepción, ellos controlan que nadie se les meta. ¡Pero son dos metros de distancia entre uno y otro...!".

El grupo de personas le responde con gritos e improperios. Lo más suave que le dicen es: "¡Estamos en Chile!".

Consciencia social

Pese a mala recepción de su mensaje, el conductor Leonardo Pessini, de 57 años, que lleva más de 11 trabajando en el tradicional transporte patrimonial porteño, dice que no se arrepiente y que lo volvería a hacer por el bien de todos.

"Yo tengo dos amigos del colegio allá en Italia y ellos me han ido relatando su experiencia allá. Por eso yo estoy más adelantado con la información. Lo que está sucediendo aquí, pasó allá hace un mes. Entonces, yo recojo todo eso y trato de cooperar", afirma Pessini.

Y agrega: "Me salió del alma porque ya era mi segunda vuelta y la gente seguía ahí, y eran puros viejitos. Y me dio rabia porque yo quería hacerles notar que se estaban exponiendo, educar un poco para que no vivamos lo mismo que en Italia, pero me agarraron a garabatos. ¡Ah, pelao cu...!, es lo que más se escucha".

Ayuda comunitaria

Aún así, Leonardo recalca que él tiene el ímpetu de tratar de ayudar a las personas, aunque la gente no siempre se lo agradezca.

"A los pasajeros de edad que suben (al trole), yo le digo en buena onda, 'oiga, usted debería estar en su casa'. Pero no los estoy retando, lo hago porque me preocupan", asegura.

En ese aspecto, el porteño reconoce que una de las cosas que le agradan se su trabajo es que le permite brindar un servicio a la comunidad.

"Mi familia y mis amigos me han felicitado por el WhatsApp. Y yo estoy tranquilo con lo que hice. Cuando después la gente que estaba en la fila vea lo que hice y entre en razón, van a decir, 'ah, el pelao cú... tenía razón", concluye.