Ayer el Consejo Directivo de Anef regional Valparaíso, interpuso un recurso de protección contra las autoridades regionales y nacionales ante la Corte de Apelaciones, que busca la protección de los funcionarios públicos y sus familias expuestas al riesgo de contagio de COVID-19.

A través de un comunicado la Anef informó que la medida apunta específicamente al jefe de Defensa Nacional para la región de Valparaíso, contraalmirante Yerko Marcic, al intendente Jorge Martínez, y el ministro de Salud, Jaime Mañalich, "por las omisiones ilegales y arbitrarias en las que han incurrido consistentes en la infracción a sus deberes de resguardo de la vida, la integridad psíquica y físicas de las personas y la salud pública, en razón de constituir dicha omisión una violación a las garantías constitucionales contempladas en el artículo 19 de la Constitución".

Y agrega que "pese a las recomendaciones de la Contraloría General de la República, OMS, Colegio Médico y todas las reuniones y acuerdos con ministros, jefes de servicio, intendentes y empresarios, vemos como las medidas asumidas por el Gobiernos y sus subalternos, hasta la fecha siguen siendo equivocas y ponen en el centro otros intereses mezquinos por sobre la seguridad y la salud del pueblo trabajador chileno".

Generan daño

Al respecto, la presidenta de la Anef Valparaíso, Mabel Zúñiga, detalló que "en esta región -y en muchas otras regiones del país- se continúa con relaciones laborales que lo único que establecen es generar más daño a la población, desprotección, indefención, y condiciones incluso psíquicas que no corresponden".

"Le hemos dicho al intendente y a todas las autoridades con las que nos hemos reunido que aquí e foco está en la salud y en la protección de las y los trabajadores y sus familias, evitar las aglomeraciones, e intentar definir claramente cuáles son los trabajo estratégicos que cada servicio público debe realizar, y frente a eso establecer cuáles de ellos se pueden hacer con trabajo remoto y cuáles deben hacerse presenciales, lo que podría reducir el tránsito de personas en menos de un 10% en las ciudades de este país y particularmente en las ciudades de esta región", opinó Zúñiga.

Fabián San Martín D.

Como un "atentado a la solidaridad" calificó el sacerdote y bombero porteño Pedro Nahuelcura, el fenómeno de los capitalinos que han optado por pasar una cuarentena en su segunda vivienda en la región de Valparaíso, como si fueran unas vacaciones.

El párroco de la iglesia Corazón de María de avenida Uruguay se mostró indignado por esta situación. "Pareciera que desde el 18 de octubre a la fecha aún hay gente que no entiende ni escucha, y no se pone en el lugar de los más vulnerables. En Santiago tienen más equipamiento y acá hay una alta población de adultos mayores que podrían ser contagiados por inescrupulosos que se han tomado unas vacaciones. No le dan importancia a lo que ocurre, pero la gente del negocio y el barrio es la que sufrirá las consecuencias".

Al sacerdote le pareció inconcebible que en un balneario del litoral se hayan terminado las vacunas contra la influenza por la sobre demanda de personas de la Región Metropolitana. "Eso es terrorismo. No ponerse en el lugar de la gente pobre, es triste, y las autoridades más que multarlos debieran hacer medidas ejemplificadoras y aplicarles todo el rigor de la ley. Es egoísmo social y no puede ser".

Misa por streaming

Nahuelcura se ha valido de las redes sociales para atender los requerimientos de los feligreses con un acompañamiento espiritual. Ante la imposibilidad de dar misa presencial, en forma diaria a contar de las 19.30 horas, de lunes a viernes, celebra la eucaristía en la página de Facebook Parroquia Corazón de Maria. Tiene cerca de 70 seguidores en vivo y en las retransmisiones la cifra se eleva aún más.

"Tenemos más gente en el Facebook que cuando estábamos en la parroquia", bromea el religioso, que añade que los fines de semana las misas se transmiten en vivo a contar del mediodía. Los fieles pueden enviar mensajes a través de la red social para solicitar oraciones particulares por algún familiar, visitas a enfermos o servicios fúnebres.

Además en la iglesia han postergado actividades de catequesis, comedor parroquial, club de adultos mayores y entrega de sacramentos como primera comunión, confirmación y matrimonio. En casos urgentes Nahuelcura ha celebrado bautizos domiciliarios donde solo están presentes los padres y el niño. Ha efectuado unos 5 en los últimos días.

"La idea es que tengan vida familiar en casa, sobre todo los adultos mayores, acompañados de la palabra de Dios", señala el sacerdote.

Como antiguo bombero, Pedro Nahuelcura a través de las redes sociales ha mandado un sentido mensaje de apoyo a los voluntarios y al personal de salud para que extremen el autocuidado en estos momentos de crisis.

"Que sepan que rezamos por ellos por todo el trabajo que están realizando",dijo. Mañana al mediodía hay una gran convocatoria a rezar el Padre Nuestro en medio de esta pandemia mundial.