"Quedar secuelado de coronavirus puede ser el fin de una carrera"
El actual jefe del staff médico de Everton habló de lo riesgoso de esta pandemia y de cómo se está actuando en el club para evitar contagios.
Sin por el momento ningún caso confirmado de COVID-19 entre sus miembros o integrantes, el área médica de Everton ha monitoreado constantemente a sus jugadores y funcionarios (que están trabajando en casa) con el fin de ganarle la batalla al temido coronavirus.
Al respecto, fue el jefe del staff médico de los Oro y Cielo, doctor Humberto Verdugo, quien habló de los alcances y riesgos de esta enfermedad y del quehacer de un club en cuarentena.
"En Everton en realidad, el tema se ha manejado en base a las recomendaciones ministeriales y no se ha hecho ninguna improvisación, ni nada distinto a la recomendación del Ministerio de Salud que es donde todos los médicos tenemos que estar enfocados. Desde el punto de vista de la prevención, se mandó a los jugadores a la casa, con pautas de entrenamiento personalizado y estamos en contacto por redes sociales; en el fondo, teniendo canales de Whatsapp y otras formas para estar al tanto de la salud de los jugadores y afortunadamente por ahora, no tenemos casos" .
-Me imagino que ustedes, en el cuerpo médico de Everton, están constantemente monitoreando a los jugadores para que ante cualquier síntoma, les llamen o informen...
-Exactamente. Hans Cuevas, que es el kinesiólogo jefe, está en constante monitorización de lo que pasa con todos los jugadores y nos reporta al área médica. En el fondo, si hubiese algún caso sospechoso se tendrían que comunicar con nosotros y vemos ahí cuáles son los pasos a seguir. Además hay un control de los funcionarios, también con otro grupo de Whatsapp; lo mismo para los dirigentes.
-Suponemos entonces que todos quienes forman parte de Everton están hoy en casa...
-Así tiene que ser, ya que la medida principal de prevención es no exponerse al riesgo de contagio y eso significa disminuir los contactos con personas. Mientras menos se interactúe con personas, menos posibilidades hay de contagiarse.
El tema es serio
-¿Por qué cree usted que todavía hay gente que no le toma el peso a la pandemia del coronavirus?
-Ir a lugares con aglomeraciones hoy en día es claramente una irresponsabilidad. Y por supuesto que hay que hacerle entender esto a la gente ya que no todo el mundo tiene por qué saber como son las propagaciones, y en ese sentido, hay que hacerle caso a las autoridades y confiar en que el ministerio y el Gobierno está trabajando con gente que está preparada para esto y las medidas que dan son en pro de la salud de la población. Ahora, por supuesto que estas conductas alarmistas que se han escuchado a ratos... eso de cerrarlo todo por fuera e irse para la casa, puede que también se llegue a eso en algún momento como se ha llegado en otros países... pero es una cuestión progresiva, no se puede paralizar la vida normal de la gente de un día para otro, sobretodo porque hay que abastecerse y tomar algunas medidas. En el fondo uno comprende que todavía no estemos con un toque de queda las 24 horas, pero hay que tomar medidas y la gente tiene que ser responsable, quedarse en las casas, salir lo mínimo posible y exponerse poco usando guantes, mascarillas, el lavado de manos que es muy importante al igual que mantener la distancia con otras personas evitando aglomeraciones, entendiendo que todavía hay que hacer algunas cosas para prepararse para un cierre que puede ser prolongado.
-¿Hay claridad respecto a cuánto podría durar el auge del coronavirus?
-Todos los brotes epidémicos tienen una curva ascendente, que nosotros estamos recién empezando eso, después se estabiliza y tras ello viene una curva descendente. Y en la medida que la curva ascendente sea lo más corta posible y se estabilice luego, el brote dura menos. De todas maneras se supone que este brote va a durar un buen rato y es poco probable que esto se termine antes de agosto.
-Hay que soportar el chaparrón, entonces...
-Así es y por lo mismo que nos han parado en seco todas las actividades porque es muy difícil dejar a toda la gente en cuarentena encerradas en sus casas por 4 meses, entonces, lo que se ha realizado entre comillas es estirar el chicle lo más posible, sin poner en riego la población. E instituciones como Everton o lugares que pueden tener la ventaja de cerrar definitivamente... es lo que tienen que hacer y mandar a la gente para la casa, lo que no sucede con los supermercados, las farmacias o los mismos hospitales que no pueden cerrar.