Marcela Guajardo Pérez
Consejeros, parlamentarios y el Colegio Médico han reiterado su inquietud sobre la baja capacidad de ventilación asistida que tienen los centros de salud en la región.
Cuando la curva de contagio aumente y más personas empiecen a llegar a los hospitales con complicaciones respiratorias, estos aparatos son de vital importancia para mantener a los pacientes estables.
El hospital Carlos Van Buren cuenta con una unidad especial COVID-19 para atender a los pacientes: tiene nueve camas críticas equipadas con ventiladores. Según lo recopilado por La Estrella, estas camas ya estarían siendo utilizadas por pacientes positivos.
En el caso de la UCI Adulto, hay pacientes con ventilación asistida, pero con otra patología, por lo que no habría disponibilidad para más pacientes COVID-19.
"Hoy no se puede reconvertir camas provenientes de otras unidades dentro de los hospitales, mientras no lleguen los ventiladores que son claves para la atención de los pacientes complejos y Todos los esfuerzos que se puedan hacer por conseguir nuevos recintos o la compra de camas clínicas, será absolutamente insuficiente sino tenemos la capacidad de contar con nuevos ventiladores y este es un problema no sólo a nivel regional, sino que nacional, porque Chile no existe stock", dijo Manuel Millones, consejero regional UDI.
Camas uci
Sin embargo, el seremi de Salud, Francisco Álvarez, aseguró que existe la capacidad para afrontar la crisis, ya que nuestra región no recibiría el peak de contagios en la misma fecha que la estimación nacional.
"Nuestra proyección es poder alcanzar a ventilar 300 personas en el peor escenario de la región, que a nivel nacional se estima que es la última semana. Pero debido a la proyección que tenemos en la región y la cantidad de contagiados que hemos tenido y con la trazabilidad que aún tenemos, puede ser que el peak en nuestra región no se presente a fines de abril, sino que se presente entre la primera y la tercera semana de mayo", explicó.
Según las cifras que maneja el Ministerio de Salud a través de las estadísticas de gestión de camas, la capacidad basal de la región de Valparaíso sería de 376 camas críticas, tanto adultos como pediátrica. Las camas totales -entre el sector público y privado- es de 3.909. Esto incluye a todos los centros de salud, como el Hospital Naval y las clínicas.
Cifras muy diferentes a las que han estado recopilando algunas autoridades políticas, quienes han visitado distintos centros de salud para ver cuáles son las mayores necesidades.
Mientras el Ministerio de Salud habla de más de 300 camas, otras estadísticas dicen que en la zona hay 57 camas UCI disponibles hasta el día de hoy. Con los recursos comprometidos por el Gobierno regional se espera llegar a 128, número muy inferior a las mencionadas por la autoridad sanitaria.
Días anteriores, el presidente del Colegio Médico regional, Ignacio De la Torre, había dicho que en nuestra región hay 150 camas UCI para atender a los pacientes que lleguen con problemas respiratorios, la mitad de lo que mencionó el seremi de Salud.
Por lo menos para hoy se espera que el Gobierno regional vote dos proyectos de mil millones de pesos cada uno para los tres servicios de salud.
Estos dineros serán dirigidos para la adquisición de necesitados ventiladores mecánicos, aunque no se sabe la fecha en que llegarían a los centros hospitalarios.
Además se presentará otro proyecto de 600 millones de pesos por parte del intendente Jorge Martínez para otra gran necesidad: insumos médicos para los centros de salud.