Priscilla Barrera Ll.

"No queremos que cierren la feria" es lo primero que dice Daniel Lagos, dirigente de los "bazares" y que representa a más de 700 comerciantes que cada jueves y domingo se instalan en la Feria Parque Caupolicán.

La preocupación de los pequeños comerciantes es que en medio de la pandemia por COVID-19 se puedan producir contagios en estas instalaciones, dado a que, según dicen, no existe un control de parte de la autoridad al cumplimiento de los mínimos protocolos sanitarios que deben existir en el actual contexto.

"Si usted viene hoy se va a dar cuenta que la gente anda como si nada estuviera pasando, la gente viene a pasear, nosotros no queremos que cierren la feria porque vivimos de esto, pero tampoco queremos poner en riesgo nuestra salud ni tampoco la de nuestros clientes", comentó el dirigente.

Con mascarillas

Daniel Lagos precisó que los asociados han adoptado las medidas de higiene que están a su alcance, como uso de mascarillas y guantes, pero quelos asistentes no andan con los cuidados debidos.

"Hoy (ayer) llegó mucha gente, no hay control en los accesos y aquí a la feria hay varios, no queremos poner en riesgo el funcionamiento de la feria, queremos que la feria se mantenga abierta, pero es un riesgo lo que está pasando y queremos que las autoridades pongan atención a esto", reiteró el dirigente.

Consultado por las exigencias que se les ha hecho a las ferias por parte del municipio y la misma autoridade sanitaria,Daniel Lagos precisó que esas medidas de distanciamiento y de aumento la amplitud de los pasillos, se hizo con las ferias hortofrutícolas, pero no con las demás ferias.

"En la feria hortofrutícola de la Caupolicán está funcionando como usted dice, con distancia entre los puestos y todo eso, pero aquí en los bazares no, y eso es lo que nos preocupa, no queremos que la gente deje de venir, o que se enferme y al final también termine no viniendo, pero queremos que la feria funcione de manera segura y así todos estamos tranquilos", propuso Lagos.

El dirigente manifestó su disposición a poder coordinar con las autoridades sanitarias para generar un mayor orden y control en esta parte de la feria.

"El coronavirus está avanzando muy rápido y eso nos tiene preocupados. Hasta ahora hemos podido seguir funcionando pero no sabemos que pueda pasar a futuro", planteó el dirigente.

Soledad Aburto lleva tres años trabajando en el emprendimiento familiar Regala Té, y cuenta que es madre de dos mujeres emprendedoras e independientes.

En su emprendimiento, Regala Té, ofrece variados tipos de té: negro, blanco, rojo, verde y azul que mezcla con frutas y hierbas que ella misma deshidrata en su deshidratador solar; pero también es experta en las infusiones.

"Esto lo empecé sola con el incentivo de mis dos hijas Sol y Denise, que también son emprendedoras. Actualmente tengo 23 variedades de té, y que pueden ser té blanco, rojo, azul, verde, negro e infusiones. Yo deshidrato las frutas como el mango, maracuyá, papaya, durazno, damasco, arándanos, frutillas. Y también deshidrato las hierbas, todo lo hago en mi deshidratador solar, y para el invierno tengo uno eléctrico", detalla Soledad.

Propiedades

La emprendedora destaca que sus preparaciones son ricas, naturales y contienen muchas propiedades.

"Mis té estrellas son el té blanco con frutilla, arándano, manzana, y el té blanco maracuyá-mango. El té blanco es muy exquisito, a parte es suave y sus propiedades sirven para las personas que tienen problemas de hígado graso, que sufren de hinchazón y todos los problemas estomacales".

Por otro lado, en estos tiempos de pandemia por coronavirus, donde los nervios y la ansiedad pueden alterar a muchas personas, Soledad recomienda las infusiones o té de Jazmín.

Valores

Respecto a los precios de sus productos, la emprendedora afirma que los 50 gramos de cualquier té o infusión tienen un valor de $4.000. El único que varía es el té de Rooibos, que tiene altas propiedades antioxidantes.