Trío sexual gatilló doble crimen en Valparaíso
Boliviano quedó preso por homicidio calificado, por asesinar de 35 puñaladas a "invitado" que mató a su pareja. No hubo legítima defensa.
En prisión preventiva en el complejo penitenciario de Valparaíso, por los 150 días de plazo de la investigación de la Fiscalía, quedó ayer un joven extranjero formalizado por homicidio calificado.
El suceso ocurrió el fin de semana en un departamento en el segundo piso de un block de la población Juan Pablo II en el límite entre Los Placeres y Rodelillo. Vecinos alertaron a Carabineros por un caso de violencia intrafamiliar. Al ingresar hallaron dos hombres desnudos y sin vida, con múltiples heridas cortantes en el cuello y otras partes del cuerpo. En el exterior del lugar estaba el boliviano E.C.O., de 25 años, que estaba herido leve en una mano. Fue detenido por Carabineros.
Debido a que la tragedia estaba confusa en cuanto a la dinámica de los hechos, el magistrado Luis Araya accedió a ampliar la detención por 48 horas, plazo que se cumplió ayer.
Formalización
En horas de la tarde el Ministerio Público formalizó al extranjero por homicidio calificado consumado. Según la Fiscalía, la madrugada del 6 de junio el imputado y su conviviente recibieron la visita de un tercero para concretar un encuentro íntimo, que tuvo lugar en el dormitorio de la vivienda.
Luego de ello, el joven boliviano concurrió al baño y al poco rato escuchó ruidos de riña, por lo que al salir encontró a su conviviente en el suelo con un corte profundo en la garganta, y al tercero involucrado, M.O.M.M., con un arma blanca en la mano tratando de huir por una ventana.
Riña
Tras el hallazgo, E.C.O y M.O.M. se trenzaron en un forcejeo resultando el imputado con lesiones leves, y el invitado con 35 puñaladas que le provocaron la muerte.
Según la declaración policial, el imputado con su pareja acostumbraban a realizar "actos pervertidos" como parte de su relación, de ahí que invitaron a un tercero.
Tras consumir alcohol y concretar el encuentro sexual ocurrió la riña. El juez de garantía, Fernando Vergara, desestimó la tesis del defensor Franco Lemos, en orden a que el inculpado actuó bajo legítima defensa. Para la Fiscalía fue "venganza" más que defensa las múltiples estocadas. El magistrado consideró al extranjero un peligro para la sociedad, y por existir riesgo de fuga dispuso su ingreso a la prisión.