40% de los niños porteños no tiene los elementos para estudiar
Estudio realizado por la Fundación Vivienda en cinco escuelas municipales reveló que esta situación afecta directamente el proceso educativo de los niños durante la pandemia.
"Mirar el territorio de espalda al mar: Urgencia Sanitaria en Valparaíso", se llama la investigación realizada por la Fundación Vivienda, que estuvo un año trabajando con niños, niñas y adolescentes de cinco escuelas municipales porteñas.
El objetivo del estudio fue revelar la situación en que se encuentran estos menores dentro del contexto de la pandemia y cómo las precarias condiciones de vivienda influyen directamente en el proceso educativo.
La organización trabajó con 134 menores y 85 hogares, pertenecientes a las escuelas San Judas Tadeo, Reino de Suecia, Jorge Alessandri, Diego Portales y Joaquín Edwards Bello, quienes viven en contexto de alta vulnerabilidad.
"El diagnóstico del proyecto 'Un nuevo hogar para aprender y vivir' evidencia que el 40% de los niños, niñas y adolescentes habitan en viviendas irrecuperables construidas con materiales precarios; la gran mayoría en condiciones de hacinamiento medio y crítico y en condiciones de saneamiento (disponibilidad de agua y servicio higiénico) deficitarias", explica el estudio.
Según esta investigación, el acceso a la educación para estos niños se ve vulnerada porque las familias no cuentan con los recursos materiales y tecnológicos y las escuelas que los tienen, están cerradas.
"(Las escuelas) Pese a todas las precariedades con las que trabajan a diario, buscan asegurar que los procesos educativos sean los adecuados, cumpliendo un rol principal como garantes de derechos: entregando alimentación, disponiendo de los implementos mínimos necesarios (como sillas y escritorios) y asegurando espacios dignos y adecuados para estudiar. En medio de la crisis actual, las escuelas no pueden cumplir con este rol y, a su vez, los estudiantes no pueden cumplir con los currículums escolares requeridos por el Ministerio de Educación porque en sus viviendas no cuentan con las condiciones mínimas que se necesitan para estudiar", agrega la investigación.
De esta manera, la responsabilidad de completar los estudios recae en los mismo niños y sus familias, muchas de las cuales no tienen acceso a internet.
Ante esta situación, la Fundación recomienda al gobierno central medidas sanitarias más restrictivas (como la recién decretada cuarentena) y que se garantice la alimentación de los sectores más vulnerables, junto con asegurar los requerimientos mínimos para poder estudiar.
La Corporación Municipal reconoció la situación crítica revelada por el estudio de la Fundación Vivienda e incluso colaboró en la investigación, pero declinaron referirse a este tema en particular y qué gestiones se están realizando para apoyar el proceso educativo de los estudiantes.