Pacientes obesos: el grupo de alto riesgo del que nadie habla
Personas que sufren de obesidad y contraen el coronavirus presentan mayores dificultades respiratorias. Mantener una dieta equilibrada es otra arma contra el virus.
La dieta y el ejercicio no son comúnmente nombrados como factores preventivos ante la pandemia del COVID-19, pero resulta que una alimentación correctamente equilibrada puede hacer la diferencia a la hora de contraer el virus.
Los expertos se han referido a los adultos mayores, y los enfermos crónicos como los grupos que hay que resguardar con mayor celeridad, pero hay otra porción de la población que también debe estar alerta: los pacientes con obesidad.
Gonzalo Cruz, investigador del Centro de Neurobiología y Fisiopatología Integrativa de la Universidad de Valparaíso (CENFI), con experiencia en el estudio de la neuroendocrinología y el metabolismo, plantea que este grupo reviste especial cuidado.
Aclara que "aunque el riesgo de contagiarse depende más de las medidas como lavado de manos o distanciamiento social y parece no estar influenciado por el peso, la severidad de la infección y la posibilidad de estar conectado a ventilación mecánica es mayor en personas obesas, sobretodo si tienen diabetes o hipertensión arterial".
Agrega que "en las personas obesas existe un estado inflamatorio permanente que usualmente se llama 'inflamación crónica de bajo grado', y al parecer esta inflamación puede exacerbar la respuesta inflamatoria del organismo frente a la infección con el virus siendo esto lo que complica a los pacientes y hace que la infección por COVID-19 sea más grave".
Respecto de la población categorizada como "sobrepeso", explica que este es el paso previo a la obesidad, y que los pacientes en este espectro pueden presentar susceptibilidad a contraer inflamación, resistencia a la insulina, diabetes o hipertensión arterial.
Dieta y ejercicio
Al consultarle si al hábito de la dieta y la actividad física -en cuarentena- tiene efectos importantes en el organismo para resistir de mejor manera el virus, el académico de la UV afirma que aún no existe evidencia científica clara respecto del COVID-19, pero "en otras infecciones virales como influenza tanto una restricción calórica leve a moderada (dietas restrictivas) como rutinas de ejercicio físico moderado ha demostrado un efecto positivo en el sistema inmunológico. Lo más importante en este caso, es asesorarse con profesionales nutricionistas o médicos, de forma que la restricción calórica sea controlada y no disminuya los micro y macronutrientes fundamentales para el sistema inmune".
Finalmente, y como un consejo para la población en general, el experto recomienda adoptar una alimentación sana y balanceada.
"Una recomendación sería evitar alimentos que favorezcan la inflamación y consumir alimentos con propiedades antiinflamatorias y antioxidantes. Alimentos inflamatorios son principalmente los que contienen grasas saturadas. Mientras alimentos con propiedades antiinflamatorias son los que contienen ácidos grasos omega 3 y frutas y verduras ricas en polifenoles. Nuevamente, es importante indicar que si la persona no tiene la claridad de que alimentos pueden ser beneficiosos o no, es bueno asesorarse por un profesional nutricionista".