Nicolás Arancibia Bórquez

El centro de entrenamientos de Santiago Wanderers, ubicado en Mantagua, ya está adaptado y listo para el retorno a las prácricas presenciales por parte del Decano. No obstante aquello, y pese a que la idea inicial del cuerpo técnico comandado por Miguel Ramírez era empezar con esta metodologia de sesiones cara a cara durante la jornada de ayer, lo cierto es que el esperado regreso se sigue dilatando.

A sabiendas de que los cuidados sanitarios que se deben tomar producto del brote de COVID-19 son fundamentales para mantener el resguardo de los futbolistas, es que desde el propio club porteño ya tienen definido el nuevo plan de trabajo para aquellos jugadores que vayan a ser citados presencialmente a entrenar en el marco de la Fase 1 del plan de retorno a la actividad emanado desde la ANFP. Según se pudo constatar a través de los mismos trabajadores que normalmente llevan a cabo sus labores en el recinto quinterano, los caturros han adaptado espacios para que un reducido número de jugadores puedan llevar a cabo labores de trabajo físico, siempre separados por una buena cantidad de distancia.

A ello se sumará a además la implementación de dispensadores de alcohol gel, junto a la instauración de un estrico procolo de seguridad para todas aquellas personas que concurran hasta las dependencias en las que los futbolistas verdes planean seguir poniéndose a punto de cara al supueso retorno de la actividad programado para el 31 de julio.

Más allá de todo lo anetrior, por motivos netamente administrativos, el retorno a los entrenamientos presenciales todavía no se ha llevado a cabo, lo que no signifca que esto se haya suspendido, ya que se espera que en los venideros días, la institución logre destrabar cada una de las trabas burocráticas y de permisos correspondientes para que algunos jugadores puedan volver a verse las caras. En esa misma línea, es importante recalcar que Miguel Ramírez no dispondría un entrenamiento obligatorio, entendiendo que hay un importante puñado de jugadores que residen en comunas bajo cuarentena, lo que se suma además a aquellos miembros del plantel que tengan problemas de índole personal o familiar.

Pares de la zona

Mientras Santiago Wanderers todavía ultima detalles para concretar su retorno, clubes de la zona como Everton y Unión La Calera ya volvieron de forma parcial a sus prácticas presenciales. Otro caso particular en la región es el de San Luis, elenco que había vuleto en el marco de la Fase 1 del protocolo establecido a sus entrenamientos cara a cara, pero que tras la cuarentena decretada en Quillota, debió volver a retomar los entrenamientos a distancia.

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