Nicolás Labra G.

No cabe duda que Quique Setién ha considerado a Arturo Vidal como uno de sus volantes de cabecera desde que asumió en el Barcelona en enero de este año, y especialmente tras la vuelta en junio debido al parón por el coronavirus, donde el chileno ha respondido con dos goles, el último el único tanto en el triunfo como visita ante el Real Valladolid.

Así lo reconoce el propio DT, quien ayer repitió elogios para el volante nacional, previo al encuentro de hoy ante el Osasuna a las 15.00 horas de Chile en el Camp Nou. "Creo que ha jugado más del 50%, al menos desde que estamos nosotros. Me parece que es un futbolista que transmite mucho positivismo, mucha energía y hace muy bien las cosas", comentó.

En efecto, desde el 13 de junio Vidal suma 620 minutos de 810, y desde la llegada del extécnico del Betis en enero son 975 de 1.530, el 63,7%, agregando a eso los 89 minutos ante el Nápoles en la ida de los octavos de final de la Champions League.

Setién no se detuvo ahí y agregó sobre su juego que "ha conseguido ocho goles, nos da llegada, mucho trabajo y a veces también su calidad. Está claro que es un jugador importante".

También tuvo elogios para Messi, que en las últimas siete fechas ligueras apenas ha convertido un gol, pero se ha prodigado dando asistencias con siete en la misma cantidad de encuentros. "Es verdad que quizá haya algunos registros que quizá no los está cumpliendo respecto a otros años, pero es un futbolista de un nivel estratosférico. Si no es en goles, es en asistencias. Todo lo que teníamos que decir de él, ya lo hemos hecho".

Se ve en el club

Setién en paralelo necesita un milagro. Vencer a Osasuna y que el Real Madrid caiga en casa ante el Villarreal para seguir peleando la Liga (ver breve). De lo contrario, y si los "Merengues" se imponen, se quedarán con el trofeo. Pese a ese escenario, el DT se ve como culé la próxima temporada.

"Por supuesto que me veo entrenando la próxima temporada, naturalmente que me veo (…) No solo es el resultado, sino la percepción de si el trabajo ha sido bueno o no. Es lo que entiendo y me gustaría que se valorase, si el trabajo está bien".

Pep Guardiola, entrenador del Manchester City, utilizó a Alexis Sánchez como ejemplo para desmitificar el supuesto excesivo poder económico del Manchester City, cuestionado por el Liverpool y el Tottenham Hotspur, después de que el Tribunal de Arbitraje Deportivo decidiera remover el castigo por incumplir el Fair Play financiero que los dejaba dos años sin jugar en torneos internacionales.

Cuestionado por eso, el español rememoró la fallida llegada del chileno en 2018 al club que compitió mano a mano con el Manchester United por su contratación. "Tenemos mucho dinero, pero quisimos a Alexis Sánchez y no pudimos costearlo. También intentamos sumar a Harry Maguire y tampoco pudimos pagarlo. No podíamos pagar como lo hace Manchester United", justificó.

El técnico siguió en esa línea defendiendo el trabajo de la directiva durante la última década, especialmente tras la compra del jeque Mansour bin Zayed, dueño del City Football Group y que ha invertido fuerte en el club.

"En la última década hemos construido un club para competir en la élite y para eso hace falta invertir. Podemos gastar lo que quieran nuestros propietarios, siempre siguiendo las reglas del Fair Play financiero", agregó. Y recordó también a Manuel Pellegrini. "Mancini y Pellegrini ganaron muchos títulos y jugaban muy bien al fútbol".

Ayer el Manchester City venció 2-1 al Bournemouth gracias a los goles de David Silva y Gabriel Jesus.