Obligan a reducir número de voluntarios en ollas comunes
Prefecto de Carabineros de Viña planteó necesidad de bajar la movilidad. Organizaciones cuestionan la medida porque aseguran que con menos personas no dan abasto.
Un total de 320 colaciones entrega cada lunes, miércoles y viernes, el comedor solidario que funciona en la sede del Comité de Vivienda Villa La Pradera en el sector de Villa Independencia, en la parte alta de Viña del Mar.
El casi millar de raciones de comida semanal que elaboran las voluntarias de este comedor, en su mayoría jefas de hogar, es posible gracias a la labor desinteresada de dirigentes y vecinas que no sólo deben preparar los alimentos, sino que también recolectarlos, ir por ellos a los centro de abastecimiento, preparar pan y mantener las condiciones higiénicas en la sede que funciona como comedor.
"Son más de 900 colaciones a la semana y resulta que hoy me entregan el permiso y nos han reducido la cantidad de voluntarios, que originalmente eran 20 personas, a sólo 6. No damos abasto, aquí no solo hay que preparar la comida, son distintas las funciones que cada uno cumple y que la gente lo hace voluntariamente", planteó María Tapia, presidenta de Comité Villa La Pradera.
Tal como ya lo plantearan con anterioridad otras dirigentes a cargo de comedores y ollas comunes, María Tapia cuestionó la medida y dijo no entender el razonamiento de la autoridad toda vez que las ollas comunes no son un paseo, sino que una necesidad y una respuesta a una crisis social que surge precisamente en la pandemia.
"Uno puede entender que las autoridades estén preocupadas de q que no haya gente circulando, pero acá los voluntarios no vienen a pasear, si éramos 20 personas o si en otro comedor son 15, es porque ese es el número que se necesita, tiene que haber un criterio. La gente está pasando hambre y pareciera que eso no lo entienden las autoridades", criticó la dirigente.
Carabineros
El prefecto de Carabineros de Viña del Mar, coronel Roberto Troncoso, explicó que no ha existido una reducción de permisos sino que una regulación de la cantidad de personas que ingresan por permiso y que apuntan al mandato sanitario de reducir la movilidad.
"Cuando se dispuso mediante un instructivo poder otorgar permisos para que estas personas puedan cocinar y transportar los alimentos a las personas que lo necesitan, para regular esto, se le dio la facultad a los prefectos para que reguláramos este tema y otorgáramos un permiso que es firmado por el prefecto respecto a la autorización que se da a la olla común. El promedio que hemos tenido ha sido entre 6 y 8 personas. Ocurre que hubo un minuto en que empezaron a llegar solicitudes de 20 y hasta de 30 personas, entonces la idea es poder regularlo", explicó el jefe policial.
Troncoso reiteró que su responsabilidad es que se cumpla la orden de evitar que injustificadamente ande gente circulando y manifestó que en aquellos casos en que sea necesario un mayor número - más de 8 personas - la organización lo explique y justifique para poder autorizarlo.
"Aquellas personas que me han planteado la posibilidad de aumentar el número de personas se le ha aumentado y hemos llegado a las 10 incluso 12", acotó Troncoso.
960 raciones de comida a la semana prepara el comedor solidario del Comité Villa La Pradera.