Nicolás Labra G.

De dulce y agraz tuvo el Inter de Milán anoche en Colonia. Por una parte, los italianos vencieron 2-1 al Bayer Leverkusen con un estelar Romelu Lukaku en delantera y clasificaron a las semifinales de la Europa League, instancia a la que no llegaban hace 10 años, cuando ganaron la Champions League con Jose Mourinho en el banco.

Pero por el otro sufrieron en los minutos finales tras la lesión de Alexis Sánchez, cuando apenas llevaba 25 minutos en cancha. Al 89' aceleró en un pique corto para pelear un balón e inmediatamente se agarró el muslo de la pierna derecha tras sentir dolor en esa zona. De ahí en más, y con largos seis minutos de tiempo agregado, el chileno se mostró cojeando, corriendo a saltos para no ocupar la pierna afectada.

Antonio Conte no habló de la lesión de Sánchez y el escueto parte médico del club indica "un resentimiento muscular en los flexores de la pierna derecha", descartando, en primera instancia, un desgarro. Basta conocer cuánto será el tiempo de baja y si podrá estar en una eventual final, considerando que el lunes 17 jugarán la semifinal ante el ganador del duelo de hoy entre el Shakhtar Donetsk ucraniano y el Basilea suizo, y la definición es el viernes 21.

En cancha, el belga Lukaku fue un dolor de cabeza sin solución para la defensa y especialmente para Edmond Tapsoba, pese a que la apertura de la cuenta a los 15' fue de Nicolo Barella con un tiro a tres dedos, justo después de una jugada que no pudo finiquitar el propio Lukaku.

Apenas pasaron seis minutos cuando el exdelantero del Manchester United se llevó con el cuerpo al superado Tapsoba y definió suavemente de zurda, alcanzando nueve partidos consecutivos con goles. El Leverkusen reaccionó rápido al 25' gracias a su figura Kai Havertz, pero de ahí vino un dominio compartido que conservó el Inter hasta el final del encuentro.

Alexis, ahora en duda, ilusionó con dos chances claras al minuto de haber entrado. Conte, por su parte, alabó a Lukaku -"está haciendo algo extraordinario"- y del partido comentó que "los muchachos dieron todo y demuestran que lo que están haciendo es algo importante. Tenemos que prepararnos bien, hacer nuestro mejor esfuerzo".

Manuel Pellegrini ya tuvo su primer día de trabajo con el Real Betis. Fue un trabajo entre comillas, porque en realidad lo que se hizo fue testear al plantel, juveniles y cuerpo técnico previo al viaje de la pretemporada, todos recibidos por el presidente Ángel Haro y el nuevo director deportivo Antonio Cordón.

De no mediar ningún caso positivo, hoy se les harán las mediciones físicas y en la tarde dejarán Sevilla con destino a Marbella, donde estarán en el primer stage veraniego hasta el sábado 22. Serán 12 días en los que el chileno empezará a valorar a los jugadores, ya que de momento no cuenta con ninguna salida ni contratación para la temporada.

Los únicos que no estuvieron presentes son el defensa marroquí Zouhair Feddal, quien firmaría por el Sporting de Lisboa, y el delantero paraguayo Antonio Sanabria tras finalizar recientemente su préstamo en la Serie A con el Genoa donde anotó seis goles.

La lista para la pretemporada incluye a 32 futbolistas, -considerando a Feddal y Sanabria- divididos en cuatro porteros, 10 defensas, 11 volantes y siete delanteros. De ellos siete son juveniles: Carlos Marín, Rebollo, Fran Delgado, Geovanni, Calderón, Robert y Raúl. Vuelven de préstamo el paraguayo, Camarasa, Narváez y Aitor Ruibal.

El Atlético de Madrid informó ayer que sus jugadores Ángel Correa y Sime Vrsaljko dieron positivo por el coronavirus, pero que el resto del plantel recibió el visto bueno para viajar a Portugal y disputar los cuartos de final de la Liga de Campeones. Los resultados negativos en el resto del plantel representaron un alivio para el club español -y la UEFA- apenas dos días antes de dar comienzo a la fase final del torneo continental. Ambos son asintomáticos y se encuentran aislados en sus residencias en España. "Solo tengo que estar aislado del resto de compañeros del equipo mientras no dé negativo en el test", explicó el lateral croata.