A través de este medio deseo expresar mi molestia ydisconformidad en relación a las políticas arbitrarias de Metro Valparaíso. Tengo una tarjeta que cancelo en forma anual la que venció el 3 de julio 2020, envié un mail a la empresa indicando que desde marzo hasta la fecha de vencimiento mi tarjeta no la he podido usar debido a la pandemia.

Desde el 16 marzo mi empresa, por resguardo a sus funcionarios, decidió hacer un receso con turnos éticos una o dos veces a la semana y de ello pude usar mi tarjeta no más de un 10%. Posteriormente se decretó cuarentena y desde esa fecha no he usado la tarjeta. Metro Valparaíso, en un gesto poco empático me hace una recarga por 90 días desde la fecha de vencimiento de esta como una forma de compensar el tiempo que no la he usado. A la fecha y sin considerar mi objeción, solicité que esta fuera recargada una vez que se levante la cuarentena y pueda hacer uso del servicio, la respuesta indignante fue que son políticas de la empresa no considerar el recargo post cuarentena.

Realmente me parece que Metro Valparaíso sigue atentando contra los usuarios frecuentes y abusa por la demanda que tiene. Me parece un abuso y una solución arbitraria de parte de esta empresa que con su eslogan "Tu metro, mi metro" quieren hacerme sentir parte de la empresa pero cuando se les objeta algo arbitrario, el eslogan se diluye.

Gabriel Larrañaga González

Esta V Región ha salido muy porfiada en relación con el virus que nos acecha. Nadie hace caso de nada. Todos quieren disfrutar de antemano de estas hermosas playas. Basta ver en Valparaíso como la gente se agita haciendo colas y más colas, contagiándose cada vez más. Y en Viña no lo hacen menos. En la calle Valparaíso cunden los porfiados que creen que ellos están inmunes contra este mal. Si seguimos así, el día del níspero en la tarde, lograremos vencer al virus maligno. Ahora, con total anticipación, la gente pide, ignorante, que contraten más cantantes para el próximo Festival.

Renato Norero

Como asiduo lector de cartas al director de varios diarios, me llamó mucho la atención el comentario de la señora o señorita Sandra Moya, aparecido el día 20-08-20, en el Diario Las Últimas Noticias. En él se refiere a la salida de las pantallas de televisión, del programa "El Chavo del ocho". Respeto su opinión, pero no la comparto. Prácticamente por dos décadas, fue un programa que nos acompañó y nos hizo reír a grandes y chicos. Hay que evaluar su contenido positivo y no le busquemos solamente lo negativo que pudiera tener. Mil veces, es preferible el Chavo, que una película donde enseñan a matar, a delinquir o dramas familiares etc. En conformidad al pensamiento de la Sra. o Srta. Sandra, habría que dejar de ver las películas de Cantinflas (pobre) y los dibujos animados como: Tom y Jerry, El corre caminos, El conejo de la suerte etc., donde: Tom, el coyote y Elmer son objeto de bullyng o maltrato físico y sicológico. Finalmente, se debe tomar en cuenta, que el problema es económico, y que cuando lo solucionen habrá Chavo para rato.

Jorge Valenzuela