Para nadie es desconocido que las Pymes y mini Pymes del rubro alimentos o gastronómico , en su mayoría están quebradas o a punto de alcanzar esa condición, sin venta, con deudas imposibles de solucionar, y por cierto deudas de impuestos con el estado, pero es el propio estado, que a través del SII envía notas hasta cierto punto amenazantes, indicando monto de la deuda y que el no pago puede significar reclusión nocturna.
Esa misma forma de actuar. debiera ser generalizada, y en especial con los grandes empresarios o con grandes empresas, pero parece que con ellos se busca condonar o hacer rebajas que para el común de los ciudadanos son improcedentes, es decir, para con los que pueden mano blanda, y para con los que no pueden mano dura.
Por otra parte los pequeños empresarios, son considerados simplemente empresarios, y por ello no validan para muchos aportes del estado, además bueno es considerar el exacerbado centralismo, ejemplo Concepción estaba en paso tres, y no podía abrir los negocios del rubro gastronómico, pero distinto fue en algunas comunas de Santiago, es decir, simplemente Santiago es Chile.
Alberto Contreras Silva