Regresó de Brasil y se encontró con que su esposa lo dio por muerto
Froilán Ernesto Díaz Arancibia fue declarado "muerto presunto" en 2014. Ahora no puede acceder a ningún beneficio. Está desesperado.
El año 1988, Froilán Ernesto Díaz Arancibia de entonces 42 años, decidió partir a Brasil en busca de nuevas perspectivas laborales. Por entonces y desde el año 1978, estaba casado con Luisa Yanulaque Espejo, a quien, asegura, le contó de sus proyectos.
Emprendió su aventura y aunque las cosas no eran tal y cual se las habían contado, se quedó en el país de la samba, manteniendo por algún tiempo contacto con su mujer y el hijo de ambos.
El año pasado, dos de sus hijos mayores - en total tiene 8 (3 en Brasil) - comenzaron a buscarlo a través de redes sociales. Uno de ellos acudió al Registro Civil y se encontró con que su padre figuraba fallecido.
Así lo relata Tatiana Díaz Pizarro, hija de Froilán de 57 años, quien ha acogido a su padre en su casa y quien decidió hacer público su caso debido a las precarias condiciones sociales en que se encuentra su padre sin poder acceder a la red asistencial del gobierno dado que no "existe".
"A mi papá se le han vulnerado todos sus derechos. Nosotros hemos golpeado todas las puertas posibles. Recurrimos a la corporación de asistencia judicial, recurrimos a la corte de Apelaciones, a la Suprema y nada. Lo que yo pido es que mi padre recupere su identidad y pueda acceder a los beneficios que le puede brindar el Estado", comentó Tatiana.
Froilán, de actuales 74 años, tiene diabetes, es hipertenso y sufrió un infarto cardíaco. Sus medicamentos debe costearlos su hija, quien trabaja acomodando autos en la feria.
"Él no tiene ingresos ni tampoco una pensión asistencial. Él es músico, hizo casi toda su vida en Sao Paulo y acá ahora no existe. Debo comprarle sus medicamentos porque no puede atenderse en el consultorio, es bien complejo todo", acotó Tatiana quien aún debe ocuparse de su hija menor y una de sus nietas.
Para Froilán hablar de todo esto no es fácil. Le emociona recordar y aún le cuesta entender que fue lo que pasó.
Toda su vida se ha dedicado a la música. Es cantante popular y toca la guitarra y el contrabajo. Es lo que le apasiona y a lo que hasta enero dedicaba sus días.
De regreso en Chile y previamente informado por uno de sus hijos, se sorprendió con la noticia de que estaba muerto, condición que figura en su certificado de defunción y que le ha traído todas estas complicaciones.
Froilán asegura que no tuvo problemas con su esposa y que no entiende qué pudo pasar como para que ella decidiera declarar su "muerte presunta".
"No sé porqué me dio por muerto. No lo entiendo. Ella hizo el registro en 2014 y el certificado dice que fallecí en 1986. Ahora ella quiere conversar conmigo, yo quiero resolver todo esto. No puedo hacer nada, quiero resolver esta situación y si es posible hablar en forma civilizada", finaliza Froilán.