Grave situación: solo 8 camas UCI COVID quedan disponibles en la región
Ocupación llega a un 95% en sectores público y privado. Hospitales encendieron las alarmas por colapso del sistema y personal médico.
Una verdadera alerta se generó ayer en la región a causa del colapso de las camas UCI COVID en la red asistencial pública y privada. Si bien el presidente del Colegio Médico de Valparaíso Luis Igancio de la Torre indicó que en este periodo estival se rebajaron las camas de 260 a 160, respecto al invierno; la ocupación actual es de 152, con apenas 8 camas libres.
"Durante el invierno se llegó a tener 265 camas UCI en un esfuerzo de iniciativas públicas, privadas y de Fuerzas Armadas. Actualmente son 160, pues ha sido reconvertir camas pediátricas para ser utilizadas en adultos, ha sido dificil reconvertir quirófanos que siguen trabajando al máximo de su capacidad para reducir y poder resolver las patologías no COVID y además porque hay un déficit de recurso humano importante en orden del 30% por licencias médicas, permisos y vacaciones", explicó de la Torre.
El facultativo Colmed afirmó que a nivel regional público se está por sobre el 91% de ocupación: "Tanto el hospital Carlos Van Buren como hospital Gustavo Fricke están en un 100%, mismo caso para Quillota".
Plan de Contingencia
"En este escenario, es muy probable que cualquier persona que necesite atención de urgencia por COVID-19, eventualmente, deba ser trasladada a otra región", aseguró el parlamentario Ricardo Lagos Weber, quien agregó que "ahora bien, el gobierno debe reaccionar rápido con un plan de contingencia ante la situación sanitaria en la región".
El consejero regional Manuel Millones planteó la posibilidad de caducar los permisos de vacaciones interregionales, pues las localidades mayormente preferidas por los visitantes han elevado sus casos activos.
"Estamos a 40 días de que parta el año escolar, por eso el llamado es al gobierno y al ministro de Salud para que se haga un rediseño de la estrategia de cómo enfrentamos la pandemia, pues la situación es muy compleja".
Cansancio de personal
Moisés Sagredo, dirigente sindical de la Confederación de Trabajadores del Hospital Carlos Van Buren, destacó que "sabíamos de esta segunda ola de la pandemia (...) Hay que decir que el personal que ha estado en este año de pandemia, está tremendamente agotado. Hay estudios que avalan esta situación. Nos gustaría también un apoyo en recursos financieros, para poder, en este caso, liberar a las personas que hayan estado trabajando y están cansadas".
La consejera regional, Nataly Campusano, también manifestó su preocupación por las cifras de ocupación, pero también por el desgaste y cansancio que han evidenciado los trabajadores del recinto hospitalario, expresando que la situación "hace urgente que se pueda inyectar mayor presupuesto para contratar más personal y a la vez también equipamiento, cuestión que han dicho los dirigentes, sindicatos y los actores del área de la salud."
91 por ciento de los cupos en unidades de cuidados intensivos del sector público están siendo utilizados.