Experto define como "tormenta perfecta" el escenario del COVID
Indicadores locales de positividad, transmisión y trazabilidad, entre otros, adelantan un peor pronóstico para los días venideros explica el infectólogo Rodrigo Cruz.
La expresión tormenta perfecta fue popularizada por una película basada en hechos reales del mismo nombre, sin embargo este término se aplica a la suma de circunstancias negativas que son capaces de crear situaciones de máxima peligrosidad; justo lo que está viviendo la región respecto a sus indicadores de COVID-19.
De acuerdo al informe más reciente emitido por el Centro de Diagnóstico e Investigación de Enfermedades Infecciosas de la Universidad de Valparaíso (CDIEI-UV), la región destaca por el peak de contagios, alcanzando el domingo 28 el máximo de 880, el más alto registrado en 24 horas desde que se decretó la emergencia sanitaria. Lo mismo acontece con los casos activos, es decir, las personas que permanecen enfermas, que durante la última semana aumentaron en un 23,3%, de 4.636 a 5.717, para establecer otro lamentable récord. En tanto la incidencia o ponderación de personas con confirmación o sospecha de COVID-19 que pueden infectar a otras por cada cien mil habitantes subió de 236,5 a 291,7, superando así por mucho a la incidencia nacional de 278,2.
PUNTA DEl ICEBERG
Para el especialista de la Universidad de Valparaíso el incremento sostenido de los contagios solo representa la "punta del iceberg" de la pandemia. Al respecto afirma que lo más complejo del momento se relaciona con la realidad que reflejan -en conjunto- otros tres indicadores muy relevantes: la positividad, la trazabilidad y la transmisibilidad efectiva.
En cuanto a la tasa de positividad, el informe del CIDEI-UV (elaborado en base a 1.000 muestras para SARS-CoV-2, derivadas principalmente del Servicio de Salud Viña del Mar-Quillota) señala que entre el 22 y el 28 de marzo el porcentaje de los test procesados por esa unidad que confirmaron la presencia de COVID-19, con respecto al total de exámenes de PCR practicados durante esos días fue de 18,4%. Esta subió en dos punto respecto de la registrada en la semana inmediatamente anterior.
"Ahora la positividad regional duplica a la nacional y es seis veces mayor a la que se considera adecuada para mantener a raya la expansión de la enfermedad. Pero si a esto le sumamos el hecho de que el seguimiento que se hace de las personas contagiados sigue siendo insuficiente, como lo relevan el indicador de trazabilidad antes de 48 horas, que apenas supera el 80% a nivel regional, y la tasa de personas contactadas por cada nuevo contagio, que alcanza a tres personas cuando al menos éstas deberían ser cinco, podemos concluir que estamos frente a un escenario realmente complejo, una auténtica tormenta perfecta"; sostiene Cruz, quien además argumentó que la tasa de transmisibilidad efectividad (R0) del COVID-19 fluctúa en la actualidad entre 1.5 y 2, siendo que el nivel óptimo de este indicador debiera ser igual o menor a 1.
En resumen los indicadores revelan que la situación es realmente crítica en la región y seguirá siendo así en las próximas semanas.



