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"La falta de conversación y liderazgo nos tiene frenados"

El consejero Manuel Millones va por la gobernación regional, con una historia de diálogo y capacidad de llegar a acuerdos transversales a cuestas.
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Marcelo López - La Estrella de Valparaíso

Manuel Millones Chirino dice estar conmovido por el mensaje que el protagonista de "El Agente Topo" lanzó previo a su viaje rumbo a la ceremonia de los Oscar, en EE.UU. "A sus 87 años, en el ocaso de su vida, Sergio Chamy nos dice que 'nunca es tarde para nada', que 'podemos tener un nuevo comienzo'. Nos regala una lección para pensar que después de todo lo malo que hoy tenemos, pobreza, desempleo, crisis sanitaria, la región puede empezar de nuevo, salir adelante. Nuestro deber como autoridades no es solo quejarnos, sino buscar soluciones y transmitir esperanza".

El consejero regional y cientista político, padre de tres hijos, y candidato a gobernador regional, tiene -además- otro ejemplo: su padre. "Extrabajador textil, debió trabajar en los planes de emergencia tras quedar cesante y sacar adelante, con esfuerzo, a una familia con seis hijos. Me dio un ejemplo de vida".

Millones ha tenido un largo recorrido, político y vital. "Hemos conocido los problemas que tiene cualquier chileno. Me ha tocado conocer nuestra región y sus carencias", agrega, indicando que eso es parte de lo que lo impulsa en esta aspiración al nuevo cargo regional.

-¿Qué lo anima a ir en esta candidatura?

-He podido participar desde el origen en el proceso de regionalización, ser parte del sueño de un nuevo Chile. Por eso, cuando surge esta posibilidad, pongo a disposición mi experiencia política, administrativa y conocimiento del territorio, mi capacidad de haber construido acuerdos con personas de diferentes sectores. Creo que es mi momento de tomar esa bandera, porque actúo por convicción, porque decidí renunciar a mi militancia y afrontar este cargo despojado de cargas ideológicas, pensando en tener la libertad de colocar una sola causa, que es la regionalización.

-Como gobernador regional, ¿Cree poder incidir en la solución de los grandes problemas?

-La pandemia, naturalmente, nos ha llevado a colocar énfasis en ejes claves, como la recuperación del empleo, la seguridad, la protección social, salud y medio ambiente, vivienda y educación, donde tendré concentradas todas mis energías y donde sí creo que podemos tener injerencia. Algunos tratan de ningunear el cargo, diciendo que no tendrá mayores competencias, sin embargo, eso es un error. El hecho de que el gobernador maneje la administración de los fondos regionales permite tener incidencia en casi todos los quehaceres de la vida de la ciudadanía de la región, es decir otorga la potestad presupuestaria para resolver carencias. En el papel las competencias son limitadas, pero en la práctica podemos incidir en mucho.

-Va haber que conversar mucho, articular una gran "conversación regional"…

-Creo que es otra de mis ventajas. Estuve 20 años en un cuerpo colegiado donde hay de todos los sectores políticos, y se requiere construir acuerdos para sacar grandes iniciativas. Y esa es una escuela, la conversación. Me tocó conversar con líderes sindicales, parlamentarios, con los exintendentes. Eso es importante porque en este momento crítico necesitamos personas capaces de llegar a entendimiento, y que no coloquen sus propias banderas, que impulsen acciones para resolver el tema de los campamentos, suplir la crisis de vivienda, avanzar en la igualdad de género, proponer soluciones para la crisis hídrica y medioambiental, sacar adelante proyectos como el puerto, que requiere un diálogo para recuperar la vocación portuaria de Valparaíso. Aquí no es un tema de un partido o movimiento, sino del bien común.

-¿Siente que puede generar ese diálogo transversal? ¿Qué ha faltado para que la región despegue?

-Diálogo y liderazgo. Ser capaces de conocernos, escucharnos, respetarnos en nuestras miradas, estar abiertos, ser receptivos. Si escuchamos a la ciudadanía, por ejemplo, en el caso de los puertos en Valparaíso y en San Antonio, cuando se inician los proyectos y no después en la fase final, vamos a validar las decisiones políticas que se tomen. Tenemos que sentar las bases para el desarrollo de la región, sacando del rezago aquellas comunas o personas que hoy se sienten invisibilizadas. Tenemos todo para ser una región de clase mundial: pesca, minería, puertos, universidades, turismo, patrimonio. Ha faltado empatía con los territorios para hacerlos participes en el desarrollo. La falta de conversación y liderazgo nos tiene frenados.

-¿Qué llamado haría a sus votantes para que lo apoyen en mayo próximo?

-La gente me conoce, sabe que soy una persona transversalmente dialogante, constructor de acuerdos, con domicilio conocido y que actúa por convicción y consecuencia. No me pierdo, y creo que lo más importante es dar respuesta a las demandas de la ciudadanía con las herramientas que tenemos. Conozco el territorio, a su gente, a los actores políticos, soy una persona de diálogo y que ofrece trabajo y más trabajo.