Estudio advierte preocupación en salud mental de los jóvenes
Según UNICEF, 1 de cada 7 adolescentes ha estado confinado gran parte de la pandemia, convirtiéndose en un riesgo en esta temática. Experto UV explica el escenario.
Francisca Palma Schiller - La Estrella de Valparaíso
El impacto de los confinamientos ha sido evidente en esta pandemia: crisis económica, pérdida de empleos, suspensión de las clases presenciales y la llegada del teletrabajo. Sin embargo, hay un aspecto que se ha convertido en una preocupación en el último tiempo y que además, mostrará sus consecuencias en el largo plazo.
Hablamos de la salud mental, factor que ha afectado principalmente a los jóvenes, según datos entregados desde la UNICEF.
En el estudio, se advierte que, a nivel mundial, uno de cada siete niños, niñas y jóvenes ha vivido confinado en el hogar durante gran parte del año producto del coronavirus, lo que supone un riesgo para su salud mental. Asimismo, la mitad de los trastornos mentales surgen antes de los 15 años y el 75% ocurren al principio de la edad adulta.
Al respecto, y para realizar una bajada nacional, el biólogo Marco Fuenzalida, director del Laboratorio de Plasticidad Neuronal del Centro de Neurobiología y Fisiopatología Integrativa (CENFI), de la Universidad de Valparaíso (UV), analizó el preocupante escenario.
"En nuestro país, entre un 16 a un 18% de los adolescentes de 12 a 18 años presenta un trastorno mental. Además, los niños, niñas y adolescentes que están bajo el Servicio Nacional de Protección a la Niñez y Adolescencia (ex Sename), el riesgo de suicidio alcanzaría al 45%", advierte el biólogo.
Por otro lado, mencionó las grandes consecuencias que han tenido que afrontar los jóvenes producto de las restricciones.
"Llevamos más de un año de confinamiento y los jóvenes han perdido el contacto con amigos, las rutinas básicas han cambiado y el nivel de estrés al interior de los hogares se ha incrementado. También hay problemas de maltrato verbal y físico, y todo eso va a tener un efecto bastante grave", manifestó el científico.
Consejos
Pese a que las políticas públicas serán la clave para mejorar la salud mental de la población, existen ciertos consejos que ayudan a palear estas consecuencias.
De esta manera, el académico UV recomienda hacer actividad física, tener una alimentación saludable y dormir entre 9 a 10 horas en el caso de los adolescentes.
"Desde el punto de vista fisiológico dormir las horas adecuadas es una condición muy importante y saludable. En promedio deberían dormir entre 9 a 10 horas, porque la melatonina, la hormona del sueño, en ellos aumenta más tarde que en niños o adultos. Si el joven se queda dormido a la medianoche y debe estar en clases a las 8 de la mañana, solo duerme entre 6 a 7 horas", explica.
A lo que agregó, "el déficit de sueño crónico trae consecuencias, como problemas en la atención y concentración, aumenta la impulsividad e irritabilidad y el mal genio, lo que podría conducir a trastornos depresivos. Hace falta más inversión e incluir temáticas de salud mental y de prevención en nuestro sistema educacional y programas escolares".