Muni de Viña aplazó desalojo de toma y exige respuesta del Gobierno
"Pedimos una solución habitacional a las personas que están ocupando el terreno, mientras ello no ocurra, no se ejecutará el desalojo", advirtió la alcaldesa Reginato. Vecinos se manifestaron el día de ayer tras notificación.
Francisca Palma Schiller - La Estrella de Valparaíso
Tras lo que parecía inminente, luego de la notificación de desalojo por parte de la Municipalidad de Viña del Mar a dirigentes de la toma "Marichiweu", ubicada en Miraflores Alto, el pasado 3 de junio y considerando el plazo de cinco días hábiles para que las personas hagan abandono del sitio, la decisión fue postergada por el propio municipio.
Pese a la noticia, que trajo calma al interior de la toma, los vecinos que componen el asentamiento irregular se manifestaron ante el temor de ser desalojados, cerrando completamente la entrada del espacio bautizado "Marichiweu", con neumáticos, latas y malezas, para así, impedir el paso.
A primera hora de la mañana, los voceros Mayte Pérez y Giancarlo Arancibia dieron sus impresiones de la situación.
"Estamos en una angustia de tener que desocupar nuestras viviendas, porque es lo único que tenemos, donde están resguardados nuestros hijos, estamos en una situación crítica. Estamos tratando de pedir ayuda", indicó Mayte Pérez.
Sumando, además que, "nosotros llegamos hace casi 2 años y ellos en 20 años no cerraron, no cercaron y que ahora vengan invasivamente nos da mucha rabia. Ellos pudieron haber llegado cuando nosotros pusimos nuestras carpas, hubiese sido más fácil, pero esperaron que nosotros hiciéramos nuestras casas y las estuviéramos habitando".
Declaración
Paralelo a la manifestación que estaba ocurriendo en Miraflores, la Municipalidad de la Ciudad Jardín enviaba un comunicado donde informaba la decisión por parte de la autoridad: no se desalojará, hasta que las familias tengan una respuesta habitacional.
"El municipio realiza un urgente llamado al Gobierno para que entregue una pronta solución habitacional a las personas que están ocupando el terreno, mientras ello no ocurra, no se ejecutará el desalojo", indica la declaración.
Por otro lado, las palabras municipales aseguran que la urgencia apunta a una pronta reubicación de los vecinos, ya que el nuevo centro de salud de alta resolución (SAR), que busca ser construido en aquel terreno, es también una prioridad para Viña del Mar.
"Atendiendo la situación sanitaria y la crisis económica generada por la pandemia, es urgente una pronta reubicación de las familias para responder a la demanda de los vecinos de Miraflores para contar lo antes posible con este nuevo centro de salud", manifestaron.
En suma a lo anterior, el gobernador regional, Gonzalo Le Dantec, complementó los dichos de la alcaldesa Virginia Reginato.
"Hemos coordinado junto al ministerio de Vivienda y Urbanismo y el Serviu, la instalación de una mesa de trabajo, regular, para que los vecinos puedan acercarse al Serviu y buscar algunas de las soluciones con las que cuenta actualmente el Gobierno", detalló.
Ante esta información, el vocero Giancarlo Arancibia respondió que, "tomamos bien la noticia, pero eso no quiere decir que no nos vengan a desalojar con el paso de los días. Queremos una mesa técnica para que nos den respuestas concretas, ¿qué nos ofrecen?".
Alcaldesa electa
Quien también tuvo palabras para lo sucedido durante la jornada de ayer, fue la alcaldesa electa, Macarena Ripamonti, quien, además, fue emplazada en horas de la mañana por los vecinos. "Anunciamos una acción judicial para paralizar el desalojo forzoso de esta comunidad", afirmó.
"Consideramos que la práctica de un desalojo sin perspectiva de derechos humanos y en medio de una pandemia, es una cuestión que sencillamente no podemos tolerar como sociedad", reflexionó la alcaldesa electa.
Por último, precisó que, "el Estado de Chile y todo su aparato público, tienen el deber de resguardar a las personas que son especialmente prioritarias y que están en una situación de grave vulnerabilidad".
350 personas viven en el asentamiento irregular de Miraflores. Voceros piden una mesa técnica con la autoridad.