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Italia logró la hazaña y tocó el cielo en Wembley. En la final de la Euro 2020, el conjunto italiano conquistó el título de naciones del viejo continente tras vencer por penales a Inglaterra en el estadio Wembley de Londres. Luego de igualar 1-1 en los 120 minutos, el equipo de Roberto Mancini se impuso por 3-2 en una emocionante tanda de lanzamientos penales.

El partido comenzó con intensidad desde los primeros minutos, pues Luke Shaw había abierto la cuenta a los 2' para los ingleses, que buscaban su primera corona de selecciones en el viejo continente. Pero Giorgio Chiellini, a los 67', tras agarrar un rebote en el área, decretó el empate y forzar el alargue.

En los penales, el héroe fue el portero italiano Gianluigi Donnarumma, quien detuvo tres lanzamientos. El arquero del AC Milan, que ahora fichará en el PSG de Francia, contuvo los tiros de Jadon Sancho y Bukayo Saka, para entregarle a su país un éxito que no conseguía desde 1968 en esta competencia. Para los de Mancini, acertaron Domenico Berardi, Leonardo Bonucci y Federico Bernardeschi, mientras que para los dirigidos por Gareth Southgate marcaron Harry Kane y Harry Maguire. En tanto, por los vencedores fallaron Andrea Belotti y Jorginho, mientras que por los dueños de casa erraron Marcus Rashford, Sancho y Saka.

Fue un partido tremendo, de ida y vuelta desde el comienzo, donde los ingleses hicieron la diferencia en el arranque tras un rápido avance que concretó Shaw (2'), tras un pase de Kieran Trippier, desde la derecha. Luego del gol, los británicos comenzaron a retroceder y le dejaron el camino libre a los azules, que poco a poco se apropiaron de las acciones y fueron avisando que estaban para mucho más. Y así llegó el empate, bien entrado en el segundo tiempo, cuando Bonucci (67') aprovechó los rebotes de una desordenada jugada, que derivó en una pelota suelta en el área chica, y venció la valla local.

Tras la paridad, ambos compartieron acciones en ambos arcos, pero sin poder hacer la diferencia, hasta llegar a un alargue donde se notó el cansancio de ambos equipos. Al ver que no había respuesta física, se conformaron con llegar a la serie desde el punto penal.

En la definición, los italianos -que ya habían eliminado mediante este expediente a España en semifinales- fueron más certeros y alzaron su segundo trofeo de selecciones del viejo continente, dejando de paso con las ganas a su rival de ser campeón por primera vez en el evento más importante de los europeos.

Queda para la anécdota la fallida jugada del estratega inglés Gareth Southgate, que en el minuto 120' de la prórroga, hizo ingresar a Sancho y Saka para tenerlos disponibles en la tanda de penales. Tristemente para los ingleses, ambos lanzadores fallaron sus respectivos remares.

Con esto, Italia vuelve a gritar campeón y luego de muchos años regresa a la élite del fútbol mundial.

La Estrella de Valparaíso