Sección Deportes

Una dignísima presentación sostuvieron los representantes chilenos del voleibol playa en Tokio 2020, Marco y Esteban Grimalt, en su difícil debut.

Al otro lado de la red, se imponían los brasileños Bruno Schmidt (campeón en Río 2016) y Evandro, que debieron dar su máximo para quedarse con el cotejo por 2 sets a 1 en el del Grupo E de los Juegos Olímpicos.

Los nacionales no partieron bien, entregando una ventaja que les costó el primer set de forma inapelable.

En la segunda manga, sin embargo, apareció lo mejor de su juego, con un Esteban ejecutando la defensa y el apoyo, junto con Marco peleando en las alturas con Evandro, ganando no pocos bloqueos, que terminaron dando la diferencia necesaria para igualar el marcador, y obligar a definirlo todo en el tercer set.

A punto

En ese tercer tramo, los chilenos nos ilusionaron y estuvieron a punto de dar la sorpresa y conseguir una victoria que habría sido histórica, pues en Río 2016 perdieron sus tres compromisos por la zona.

A los brasileños se les vio complicados cuando pidieron un minuto de descanso cuando estaban dos puntos abajo. La experiencia y liderazgo de Schmidt, uno de los mejores jugadores de la disciplina, fue clave para que los brasileros torcieran la mano y dieran vuelta el marcador, sacando una ventaja importante en el último set (que se juega a los 15 puntos, a diferencia de los primeros dos, que son a los 21), y quedándose con el partido con un marcador de 21-15, 16-21 y 15-12.

Pero nada está perdido, pues en el Grupo E, integrado también por Marruecos y Polonia, dos equipos avanzan a la siguiente ronda, junto con los dos mejores terceros.

El siguiente rival de Marco y Esteban Grimalt será Polonia, la madrugada del martes, a eso de las 04.00. Con el nivel mostrado por los chilenos, da para ilusionarse.

La Estrella de Valparaíso