Fiscalía reabre causa de joven que perdió la vida en casa de su pololo
Franshesca González Miranda tenía 18 años y en un primer momento se descartó la acción de terceros. Sus padres se querellaron por homicidio porque nunca han creído la tesis del suicidio.
Una joven alegre y comunicativa. Así describen sus padres a Franshesca González Miranda, quien con solo 18 años habría decidido terminar con su vida el pasado 24 de abril al interior de la casa de su pololo con quien vivía desde enero de este año en la comuna de Quilpué.
Para Marco y Jubitza, las dudas en torno al supuesto suicidio de su hija han estado desde el primer minuto y han apuntado con fuerza a la responsabilidad que en este caso podría tener la pareja de la joven en complicidad con su progenitora.
Y es que ambos aseguran que Franshesca no lo pasó nada bien desde que decidió, enamorada, abandonar su casa. Malos tratos de su pareja y de la madre de éste, habrían motivado la decisión de la joven de regresar a su hogar, sin embargo, su abrupta muerte terminó con esos planes.
"Entre fines del mes de marzo e inicios del mes de abril, mi hija me contacta con la finalidad de retornar al hogar familiar, por las malas relaciones de convivencia con la madre de su pareja e inclusive la violencia ejercida tanto de forma psicológica y física de parte de Matías Muente Herrera hacia mi hija; cambio de casa que nunca se concretó", se lee en la querella presentada en mayo.
La causa en torno a la muerte de la estudiante de enfermería según el informe de autopsia, descartó en mayo la participación de terceras personas, por lo que, al no constituir delito, la causa se cerró.
Sin embargo, los padres de la joven mantuvieron su postura y tan seguros están que presentaron una querella por homicidio contra todos quienes resulten responsables de la muerte de Franshesca.
La acción judicial llevó a que la Fiscalía de Quilpué resolviera reabrir la causa y encargara diligencias tendientes a confirmar lo establecido en primera instancia o establecer una causa distinta.
"En mayo de este año el Ministerio Público decide dar por terminada la causa relacionada con el fallecimiento de la víctima, esto se determinó en base a las conclusiones del informe de la Brigada de Homicidios y al informe del Servicio Médico Legal donde se estipulaba que no había participación de terceros. Antecedentes que para la Fiscalía son serios, objetivos y científicos, que permiten determinar una causa de muerte", precisó la fiscal jefe de Quilpué, Mónica Arancibia.
La persecutora añade que con posterioridad "en el mismo mes de mayo se recibe una querella presentada por la familia de la víctima, la que fue acogida por el tribunal. Esto determinó la reapertura de la investigación y el desarrollo de nuevas diligencias, las que fueron solicitadas por la parte querellante y que se están trabajando con la Policía de Investigaciones".
La abogada explica que la "Fiscalía está obligada a seguir todas las líneas de investigación, hasta establecer una situación diversa de la que se señaló en un origen o confirmar lo que se había establecido en una primera instancia".