Everton definitivamente extravió el rumbo. Poco queda de aquel equipo que llegó a estar 13 partidos invicto y que llenó de esperanzas a Viña del Mar con buenas presentaciones en la Copa Chile, estancándose en una mala racha en la que no solo le cuesta ganar, sino que también carece de un juego que le permita generar chances de gol en el arco contrario.

En jornada sabatina, los auriazules recibieron en casa a Curicó Unido, uno de los elencos que está luchando por no perder la categoría a fin de año, pero los ruleteros no fueron capaces de imponer su localía ni su fútbol. Dentro de los 90 minutos, fueron contadas con una mano las opciones que los pupilos de Roberto Sensini tuvieron para abrir el marcador, algo que cada vez genera más preocupación en la Ciudad Jardín.

Lo peor es que el mal juego tampoco se debió a una gran presentación de los albirrojos, quienes salvo un golazo bien anulado por fuera de juego de Leandro Benegas, tampoco mostraron demasiado en los pastos del coloso de subida Padre Hurtado.

Disconforme

Tras la brega del sábado, Roberto Sensini confesó que "no hicimos un muy buen partido, no tuvimos contundencia y las veces que llegamos fueron muy pocas como para ganar. En otros partidos de local hemos empatado o no ganado pero hemos tenido muchas más opciones, esta vez no pudimos ser el equipo que queremos ser, principalmente de mitad de cancha para adelante, y eso nos costó sumar dos puntos".

El adiestrador argentino además indicó que de cara al duelo de mañana ante La Serena, programado para las 16.00 horas en el estadio La Portada, "Matías Jadue no va a estar a disposición, mientras que lo de Pedro Campos lo tenemos que revisar de acá al lunes par ver si viaja con nosotros, ya que había tenido un golpe en la rodilla durante la semana".

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