Con el cierre de esta nueva elección presidencial y con la ratificación de un eficiente Servel, Gabriel Boric ratificó en las urnas con un claro y contundente 55,9% de las preferencias (4.620.671 votos), ser el nuevo presidente de Chile y terminar con la incertidumbre de quién nos guiará en los próximos 4 años. Un liderazgo joven que supo salir del progresismo de Ñuñoa y leer en 2ª vuelta con humildad y devolver la esperanza a millones de chilenos que puede haber un mañana mejor.
Gobernar es conducir, guiar, gestionar, pero también empatizar con el ciudadano, eso es lo que le dará valor a su gobierno. Nadie puede discutir que nuestro país necesita cambios estructurales, los cuáles tienen que ser acompañados de certezas, de respaldo, para lo cual se hace necesario dialogar, no por WhattsApp, Twitter, Tik Tok o algo por el estilo, se necesita escuchar al otro, verse a la cara y convencer de que el único beneficiado es la persona en toda su integridad.
Llegó el cambio generacional que tanto se hablaba y la democracia continúa siendo un sistema donde aún podemos seguir entendiéndonos y confiando, eso es indudable. Son el nuevo rostro de la política, esperamos que estén a la altura y que todo lo que se condenó por años, sean prácticas del pasado y vengan nuevos tiempos. La confianza está depositada, la ciudadanía está ansiosa, no defrauden, hagan sonreír a este pueblo con sabiduría, con decencia, con amor, de que un nuevo Chile con ustedes es mejor.
Marcelo Chávez Galleguillos