Marga Marga: un humedal urbano para Viña del Mar
En diciembre del 2021 se presentó un recurso de protección para evitar la destrucción de este rico ecosistema que nace en Quilpué y en Viña del Mar, hoy amenzado por la industria inmobiliaria y la contaminación.
Javiera Espinosa - La Estrella de Valparaíso
Estacionamientos, ferias productivas y de entretención y en ocasiones microbasurales son parte del paisaje habitual del Estero Marga Marga, desde Quilpué hasta su desembocadura en la ciudad jardín. Los usos que le dan son variados, pero son pocos los que reconocen en él la posibilidad de un corredor ecológico.
"El desconocimiento que existe de este lugar como un humedal y las funciones que ha cumplido por años, han sido invisibilizadas dándole usos que no deberían", explica Esteban Araya, licenciado en Geografía y cofundador del Observatorio de la Costa, tras la presentación de una solicitud de protección del Estero, realizada por el consejero regional por Manuel Millones; apoyado por el diputado electico republicano Luis Sánchezy Arnaldo Arancibia; ingeniero ambiental.
Millones destaca: "esta iniciativa no es nueva, lleva décadas siendo una necesidad cada vez más urgente de la ciudadanía, pero en este contexto de cambio climático y mega sequía la protección de la biodiversidad ha pasado a ser una demanda transversal sin color político".
Actualmente en la Región de Valparaíso existen 830 humedales, y de ellos, cuatro son urbanos protegidos por la ley, lo que implica que las autoridades locales y ministeriales tienen herramientas adicionales para la preservación y protección de estos. Sin embargo, el panorama hace años atrás no era el mismo y según datos de un informe del Ministerio de Medio Ambiente, los humedales "eran considerados lugares inhóspitos, llenos de insectos y alimañas peligrosas, fuentes de enfermedades, cuyo mejor fin era ser desecados y ser utilizados para otros propósitos, como labores agrícolas o construcción de casas". No muchos salieron de esa creencia.
Incluso, quedando en evidencia en humedales reconocidos a nivel internacional, como es el caso del humedal El Yali, ubicado en la comuna de Santo Domingo, donde un reciente estudio encontró concentraciones de plomo y cobre en niveles de contaminación, "lo que resulta un riesgo, porque puede transferirse a los organismos vivos, acumularse y afectar a las redes alimentarias", explica la académica de la Facultad de Ciencias Naturales y Exactas de la Universidad de Playa Ancha, Cecilia Rivera, quien lideró la investigación.
Estero marga marga
La extensión del Estero se da entre las comunas de Quilpué y Viña del Mar, alcanzando 193 hectáreas, con un largo de 18,9 km y un perímetro de 38,7 km.
Millones comenta que por mucho tiempo el Estero "solo estuvo asociado a una molestia sanitaria debido a los vertidos contaminantes, botadero de escombros y microbasurales en gran parte de su trazado y nunca se le valoró como un patrimonio ambiental y, es más, tampoco se le tomó el peso a cómo puede aportar a lograr una mejor adaptación al cambio climático".
Sin embargo, en el 2014 el Centro Cultural y Recreativo Ponga (CCRP) de Viña del Mar, le declaraba en una misiva a la alcaldesa de la época Virginia Reginato, que no destruyera el Estero Marga Marga: "Tienen planificado eliminar dicho humedal para evitar inundaciones en los sectores de Limonares, El Salto y Miraflores Bajo. El año 2007 la Municipalidad autorizó el uso de retroexcavadoras para destruir el mismo humedal, bajo los mismos argumentos".
Junto con eso Esteban Araya explica que el estero es un importante corredor biológico, pero además es un humedal costero, el que puede prevenir y amortiguar los impactos de marejadas o un tsunami", sin embargo, "en el estado en que se encuentra no le resultará muy fácil por la cantidad de intervenciones antrópicas que tiene". Y añade "el que sea considerado como un humedal urbano permitirá recobrar el valor patrimonial que tiene, recuperar servicios eco sistémicos que provee, pero lo más importante es que todo proyecto que quiera realizarse sobre éste deberá someterse a una evaluación ambiental; de esta forma podemos pensar en que no se debería destruir el estero, como lo hizo la plataforma que se construyó para situar la feria".
En ese mismo sentido, parte de la solicitud expresa que este reconocimiento implicaría "la posibilidad para investigaciones geológicas, paleontológicas, zoológicas, botánicas y ecológicas". Junto con eso, allí se explica que el Estero Marga Marga podría ser considerado una fuente hídrica en periodo de escasez máxima, un nicho de muchas especies vegetales y animales, un espacio de captura de CO2; siendo un reductor de las emisiones de carbono, un filtro natural de aguas y potencial corredor biológico, y, además, un lugar de recreación para la población.
Una de las principales amenazas que enfrenta el Marga Marga es el desarrollo inmobiliario que se viene gestando hace años en la ciudad. Es por eso que Millones plantea que en ese escenario "tenemos el deber de replantear nuestros modelos de crecimiento, sobre todo en términos demográficos, en los que hay que optimizar el uso de las superficies disponibles, buscando un equilibrio".
Al respecto, el geólogo del Observatorio de la Costa, pone en importancia en el diálogo entre la comunidad y el estero, "debe ser apoyado por las autoridades, centros de formación educacional y organizaciones de la sociedad. Que pongan en valor este ecosistema, que los viñamarinos seamos capaces de reconocer el Estero como parte de nuestra identidad patrimonial, no solo natural sino que también cultural; los esteros entregan sedimentos que son depositados en las playas, existe una relación directa en su mantención, sin éstos la erosión sobre las playas sería mayor, por lo que enriquecen además otros aspectos de nuestro patrimonio natural".
En el mismo territorio, serían protegidas especies como el cururo, un roedor endémico de Chile, o la mariposa de Chagual, conocida por ser una de las mariposas más grandes de Chile. Ambas especies se encuentran en peligro de extinción.
En relación a la flora del Estero Marga Marga, allí abundan los Chaguales plantas que llegan a alcanzar los tres metros de altura; dientes de león, reconocidos por su aporte de vitaminas A,B,C y D.También está presente la Añañuca, flor que se caracteriza por crecer preferentemente bajo arbustos y flores, y que se destaca por ser una de las primeras en florecer después de las lluvias.
El consejero regional, alude a la esperanza que la declaración del humedal se dé en la actual administración del presidente Sebastián Piñera, sin embargo, consultada al respecto para esta nota, sobre las consecuencias de la urbanización y el incremento de la pérdida de estos ecosistemas, la seremi del Medio Ambiente Victoria Gazmuri, -quien es la primera autoridad en declarar la admisibilidad de esta solicitud- no emitió declaraciones.

