Gian Franco Giovines - La Estrella de Valparaíso

Luego de tres años de trabajos, el pasado viernes finalizó la realización de la "Escalera de los Sueños" en el cerro Santo Domingo de Valparaíso.

La obra que embellece la escalera homónima del cerro, fue diseñada por el artista Gonzalo Ilabaca, además de contar con el patrocinio de DUOC UC y con la colaboración de distintas agrupaciones sociales, tales como Trotamuros y Corporación La Matriz.

"Esta es un invitación que hizo el padre Gonzalo Bravo, cuando era párroco de la Iglesia La Matriz. El sueño de él era hacer esta Escalera de los Sueños. De allí salió la idea de hacer un mosaico e integrar al DUOC, a Trotamundos y a los vecinos en el proceso", cuenta el artista Gonzalo Ilabaca.

Apología a valparaíso

La colorida obra está compuesta principalmente por una enorme azulejería que recorre buena parte de la escalera Santo Domingo. En ella, se pueden apreciar unas largas ramas, acompañadas de hojas y de tiernas aves con colores rosáceos y azulados que embellecen el lugar.

"Es una escalera vegetal, que une la luna, el sol y la naturaleza", explica Gonzalo Ilabaca.

Alrededor de aquella escalera, además, se ubican varios murales confeccionados con mosaicos. El más grande de ellos (imagen de arriba a la izquierda), resalta la belleza de la Ciudad Puerto: "Es una apología al Valparaíso oceánico. En ella está la condición de anfiteatro y los oficios relacionados al mar, que le dieron la identidad a Valparaíso: el dique, los portuarios y pescadores", describe el artista.

Asimismo, en sus cientos de azulejos, el mural reluce la frase 'Valparaíso: que los primeros no seamos los últimos'.

"Las imágenes cada uno las puede interpretar como quiera, pero las palabras son bien claras. Valparaíso fue el emporio del Pacífico y ahora estamos en los últimos. Este mosaico quiere apuntar a la rebeldía, a recuperar Valparaíso", consigna Gonzalo.

De valpo, para valpo

Más allá de los coloridos peldaños y su reconocible belleza, la "Escalera de Los Sueños" también destaca particularmente por ser una obra construida por porteños y para porteños. Alumnos de DUOC UC, voluntarios de agrupaciones y vecinos fueron partícipes de la elaboración de los mosaicos.

Carlota Vega, mosaiquista de Trotamuros fue otra de las personas clave en el proyecto: "Fuimos los que les enseñamos a usar mosaicos a todos los voluntarios, incluyendo al artista", señala.

"La idea y el compromiso de esta obra es devolverle el color a Valparaíso", agregó.

Claudio Salas, director de DUOC UC Valparaíso subrayó que "esto es un orgullo y un momento histórico para la ciudad".

En la misma línea, la directora social de Corporación La Matriz -Romina Cabrera-, destacó que "con amor y voluntad se puede dignificar el espacio público para todos".