Detención ciudadana
Llama la atención la gran tribuna periodística que se ha dado a la última detención ciudadana que tuvo como resultado el fallecimiento de un joven que había ingresado a un domicilio particular, al parecer huyendo de un asalto. Que el hecho es lamentable, claro que sí, pero ante la desprotección de parte de las autoridades locales y policiales los vecinos deben protegerse de la delincuencia desatada. Por el contrario qué pasa con los delincuentes cuando asaltan propiedades particulares y negocios sin medir ninguna consecuencia y atan y amordazan a sus dueños sin importarles si son adultos mayores, mujeres o menores produciéndoles un daño físico y sicológico, quedando la mayoría de estos casos impune. Lo mismo ocurre con las encerronas o portonazos en donde los delincuentes en su mayoría menores de edad son capaces de matar con tal de conseguir sus propósitos, quedando los ciudadanos honestos expuestos a lo que esta lacra del país quieran hacer. La gente ya está cansada de tanto atropello en sus derechos, está cansada de pedir ayuda sin lograrlo, llaman a las policías y éstas no van porque no tienen los recursos ni personal para acudir al llamado. Entonces quiénes están obligando a que los vecinos se unan, se armen y que desgraciadamente se llegue a la justicia por sus manos. Juzgue usted.
Leopoldo Vásquez M.