Plataforma alerta efectos de sequía en La Campana
La herramienta fue creada por investigadores del instituto de Geografía de la PUCV y trabaja usando datos del sensor MODIS, a bordo de 2 satélites gemelos NASA: Terra y Agua.
Mirian Mondaca Herrera - La Estrella Quillota-Petorca
En una situación de extrema sequedad, con valores no vistos en los últimos 20 años. Ese es el alarmante presente por el cual está atravesando el Parque Nacional La Campana, ubicado entre las comunas de Olmué e Hijuelas. Si bien no es algo que haya estado lejos de lo que se podría suponer, si se consideran las bajas precipitaciones registradas en la zona, ahora esta problemática y su afectación a la vegetación de este lugar protegido, quedan en evidencia producto de una plataforma de monitoreo ideada por investigadores del instituto de Geografía de la Pontificia Universidad Católica de Valparaíso (PUCV). El detalle, además, está disponible en el portal web de su Laboratorio de Geoinformación y Percepción Remota, para todo aquel que desee confirmarlo con sus propios ojos.
A disposición de la Conaf, que es responsable de esta área protegida, los investigadores de la PUCV pusieron cuatro Plataformas de Monitoreo Fenológico, las que permiten medir periódicamente si los niveles de verdor son normales, tomando como referencia datos de la NASA de los últimos veinte años. Una de esas herramientas está en La Campana, mientras que las otras se encuentran en Río Clarillo, Nahuelbuta y Pumalín.
Superficie en alerta
Considerando el caso particular del Parque Nacional La Campana, los datos dan cuenta de que el 38% de la superficie de este lugar protegido y de sus alrededores ya está en alerta, el 18% en precaución y solo el 0,03% en recuperación. Aquello, remarca Roberto Chávez, director del Laboratorio de Geoinformación y Percepción Remota del Instituto de Geografía de la Pontificia Universidad Católica de Valparaíso (PUCV), "significa que a febrero de 2022 el parque está en una condición extremadamente seca. Todas las zonas rojas tienen niveles de verdor que corresponden al 2,5% de los valores más bajos de verdor observado en 20 años de registros MODIS de NASA. Esa es una consecuencia de la hiper sequía que estamos atravesando en la zona central".
La utilidad de esta herramienta, de actualización continua y permanente, es evidente, por lo que puede ser empleada no solo para evaluar el impacto de la falta de lluvia, sino para que los guardaparques puedan monitorear cualquier disturbio que afecte el follaje de la vegetación. "Va a quedar plasmado en estos mapas cualquier evento que afecte la vegetación de los parques. Entonces nosotros lo hemos utilizado para evaluar incendios, sequía o por ejemplo invasiones de insectos que pueden comer hojas de un gran número de árboles. También podría ser usado para detectar tala de bosques especialmente en parques con zonas de difícil acceso", añade Chávez.
Las cuatro Plataformas de Monitoreo Fenológico que son parte de esta iniciativa usan datos del sensor MODIS, a bordo de 2 satélites gemelos: Terra y Aqua.