El rol del padre en el cuidado y crianza de los hijos: ¿estamos al debe como sociedad?
Ad portas de la celebración del Día del Padre analizamos la transición del progenitor solo proveedor a uno más involucrado en el diario vivir de sus retoños y cómo ha sido la adaptación a esos cambios.
Por Mirian Mondaca
Padres cargando a sus pequeños hijos e hijas mientras pasean por algún parque o jugando con aquellos que están un poco más crecidos: es una imagen que este domingo 19 de junio seguramente se replicará en innumerables ocasiones a lo largo y ancho de Chile y en todos aquellos países donde se festejará el Día del Padre.
Si bien claramente todos ellos lo harán con el mayor amor hacia sus retoños, para un número incipiente de ellos no se trata de una actividad exclusiva de esta especial jornada, sino que de un acto que es parte de un rol activo en el cuidado y la crianza que en este siglo, y especialmente en la última década, que están comenzando a asumir.
Para llegar a este punto en el cual hoy nos encontramos es posible atribuir la injerencia de los estudios de género que desde los años '50 y '60 del siglo pasado han cuestionado la figura del padre, principalmente desde la búsqueda de igualdad y paridad.
Aquello sumado al ingreso cada vez más frecuente de las mujeres al mundo laboral y también la innegable precarización de la vida, ha llevado a que un buen número de padres asuman que no están en posición de ser el exclusivo proveedor económico de la familia.
De este modo, han decidido compartir las labores del hogar, entre ellas el cuidado y la crianza de sus hijos e hijas, la mayoría con gusto.
Desde el inicio juntos
Diferentes estudios en el mundo coinciden en la importancia de la presencia paterna, sobre todo durante las primeras semanas de vida del hijo o hija, en relación al apego, ya que ese será el pilar de la relación que se construya a futuro.
De hecho, en la revista Pediatrics, de la Academia Americana de Pediatría, se publicó un artículo que aborda los roles de los padres en el cuidado y desarrollo de sus hijos en los últimos 10 años. En el texto, se objetiva sobre el surgimiento de una nueva paternidad, con unos padres más entregados a la crianza y que intentan equilibrar de forma más ecuánime las exigencias laborales y las responsabilidades en la casa.
La piedra de tope en la mayoría de los casos para aquellos hombres que desean estar presentes y asumir un rol paterno activo durante las primeras semanas de vida de sus retoños es precisamente el trabajo.
Como una forma de intentar abordar aquella problemática, en octubre de 2011 entró en vigencia la Ley de Permiso Postnatal Parental, la que permite -entre otras cosas- que la madre traspase este permiso al padre desde la séptima semana.
Si bien aquella ley significó un paso adelante en cuanto a las posibilidades de los hombres para estar presente en la crianza de sus hijos o hijas, existen empresas en el país -que acorde a los tiempos que corren actualmente- fueron más allá y han mejorado este permiso, con lo que se permite que los padres accedan a la posibilidad de estar junto a sus retoños desde los primeros días de vida, compartiendo los cuidados junto a las madres.
Una de esas compañías es VTR, que desde el 2019 implementó el post natal masculino, que permite a padres o cuidadores que trabajan allí tomar siete semanas de licencia adicional a los días legales, distribuidas de corrido o con flexibilidad.
Juan Muñoz es quilpueíno y uno de los 90 colaboradores de la empresa que ha accedido al post natal masculino en la compañía. Si bien este es su tercer hijo, ha sido el único con el cual ha podido acceder al beneficio, ya que antes trabajaba en otro lugar.
Para Muñoz, estar junto a su retoño y su pareja durante los primeros días y semanas de vida de su hijo ha sido una experiencia maravillosa y que le ha permitido estar presente en momentos únicos e irrepetible.
"Con Iván es el único al cual he podido acceder a este beneficio. Estar con él en sus controles, sus primeras vacunas, a mí como hombre me entregó un bienestar saber que podía estar ahí y poder vivir esos momentos que anteriormente fueron contados. Quedará grabado en nuestras vidas que pudimos estar juntos como pareja al cuidado de nuestro 'conchito'", relata, junto con remarcar que precisamente aquello contribuye al apego entre padre e hijo.
También quilpueíno, Luis Romero es otro de los trabajadores de la compañía de telecomunicaciones que accedió al post natal masculino, para estar junto a su hija recién nacida y compartir las labores con su pareja. Con sus dos hijos anteriores tampoco pudo acceder al beneficio, por lo que también fue una experiencia nueva.
En su caso, pudo estar presente en el primer baño de su bebé y compartir esa labor junto a la madre, lo que también aportó al bienestar de la niña. "Pude estar en el primer baño de mi hija, pudimos filmarlo, lo hicimos con tranquilidad (...) Hasta el día de hoy que la bañamos no llora", señala.
Además, este tiempo compartiendo con su pareja el cuidado lo ha usado también para turnarse a la hora de mudarla y atenderla cuando la recién nacida se despierta por las noches: "Las primeras mudas las hacía ella y yo dormía y más en la madrugada me despertaba y las veía yo. Feliz, después se volvió una rutina, una semana me toca a mí y otra a ella. Esas labores siempre son compartidas y así debiese ser", enfatiza este padre quilpueíno.
cuidados
Vivir esas experiencias que solo entrega estar al cuidado de los hijos o hijas en las primeras etapas de su vida determinará el futuro vínculo del menor con sus padres y también de su propia existencia.
En ese sentido, la sicóloga y docente de la Universidad de Playa Ancha (UPLA), Lilian Pérez, sostiene que los niños y niñas necesitan a ambos padres como pilares fundamentales para poder crecer felices y equilibrados, por lo que -dentro de las posibilidades- es importante procurar aquello.
"El padre puede participar del cuidado aún desde el período intrauterino al acompañar en la gestación a la madre y otorgarle los cuidados y acompañamientos necesarios en un estado en el que ella está más vulnerable por el cambio físico y psicológico que conlleva el embarazo. Luego el parto y los primeros meses de vida cuando la lactancia es casi exclusiva y con libre demanda por lo que la madre está extremadamente cansada, escasean los tiempos para descansar por lo que se agradece el cuidado del progenitor tanto para el cambio de pañales c omo para el reemplazo en las labores de las cosas de la casa", indica la psicóloga, quien además sostiene que el padre debiese participar en todo el proceso del alumbramiento.
Además, Lilian Pérez entrega un interesante antecedente en relación a lo determinante que puede ser la presencia de una figura paterna para la o el recién nacido en cuanto a la comunicación y el desarrollo del lenguaje.
La especialista indica que "cuando solo se relaciona con la madre, generalmente el niño no realiza tanto esfuerzo comunicacional puesto que la madre casi adivina lo que el niño necesita, ya que está de manera permanente atenta. En cambio, con el padre desarrolla una relación con base en lo verbal lo que obliga al niño a esforzarse en aprender vocabulario y conectar con sus necesidades y las del padre".
Resta por avanzar
La posibilidad de acceder a un postnatal para aquellos padres que trabajan es sin duda una herramienta que, usada de manera correcta, contribuye a que los hombres puedan tener la experiencia de tener un rol activo en el cuidado y crianza de sus hijos o hijas durante sus primeras semanas de vida.
De hecho, en el último tiempo han surgido iniciativas en el Parlamento que apuntan a mejorar la actual legislación, entre las que incluso se considera a las parejas del mismo sexo.
Este es el caso del proyecto de ley presentado la semana pasada por la senadora Ximena Rincón (DC) y patrocinado por sus pares del mismo partido, Matías Walker e Iván Flores, por Isabel Allende (PS) y Jaime Quintana (PPD), que busca que las parejas del mismo sexo puedan acceder a los permisos pre natal, post natal y fuero laboral.
A los esfuerzos por mejorar la actual legislación, se suma otro proyecto de ley (que no considera a las parejas del mismo sexo), presentado en octubre del año pasado por un grupo de parlamentarios de la UDI, entre ellos el diputado en ejercicio Juan Antonio Coloma Álamos.
Esta iniciativa buscaba establecer un postnatal de un mes para los padres, extendiendo el permiso legal de cinco días hábiles con el que hoy cuentan los hombres en caso de nacimiento de un hijo o hija, más la porción del postnatal que le puede ceder la mujer.
Si bien cada vez más son los padres que deciden compartir el cuidado y la crianza de sus hijos o hijas, al revisar cifras del Sistema de Información de Subsidios Maternales (SIMAT) a las cuales pudo acceder La Estrella, se observa que aún la cantidad de padres -en comparación a las madres- que han solicitado el postnatal parental es baja. Entre los meses de enero y abril de este 2022, a nivel nacional se han iniciado 26.587 de estos permisos y de ellos solo 66 fueron traspasados al padre, lo que equivale a apenas el 0,25%.
En tanto, según cifras de la Superintendencia de Seguridad Social (SUSESO), durante el 2021 apenas un 0,15% de los 6.555 permisos de postnatal parental que se iniciaron en la Región de Valparaíso fueron traspasados a los varones.
Lo anterior da cuenta de que, aunque es creciente el interés de los hombres por ser padres activos y compartir el cuidado de sus hijos o hijas durante las primeras semanas de vida, aún está lejos de ser uniforme.
En línea con aquellas reveladoras cifras, la seremi del Trabajo, Susana Calderón, remarca que "como Gobierno feminista, donde uno de nuestros principios basales es avanzar hacia la equidad de género en el mundo laboral y la recuperación de la empleabilidad femenina, no solamente debemos diseñar estrategias de corto y largo plazo para 'equiparar la cancha' entre hombres y mujeres, sino también debemos empujar el necesario cambio cultural donde se consagre la co-responsabilidad de madres y padres en el cuidado de sus hijos e hijas, y con ello, logremos potenciar la inserción laboral de las mujeres de manera efectiva, quienes durante generaciones han debido convivir con la errónea incompatibilidad entre la maternidad, la crianza, la vida familiar con el mundo del trabajo".
Cifras más cifras menos, un nuevo Día del Padre ha llegado y, junto con los infaltables festejos y saludos que se multiplicarán a lo largo y ancho del país, nunca está demás dar espacio a la reflexión sobre aquel rol y lo determinante que es en la construcción de la sociedad.