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Obligatoriedad empujó el espíritu cívico: participación se vio en las calles

Región contaba con un padrón electoral de 1.636.837 personas. Excesivas filas y desorden en las entradas de los locales fue parte del panorama.
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Francisca Palma Schiller

Fue en el año 2012 cuando entró en vigencia el voto voluntario, fecha en la que la participación en las urnas quedó a disposición de la ciudadanía. Hoy, a diez años de aquel cambio, la obligatoriedad volvió a marcar un proceso eleccionario en nuestro país, punto que sin duda, determinó a este 4 de septiembre.

Una salida a las calles de forma masiva, como también un deber que cumplir sin excusas, hizo despertar el espíritu cívico en las distintas comunas de nuestra región, espíritu que se sintió en cada uno de los locales de votación, los cuales se caracterizaron por sus largas filas -algunas incluso de varias cuadras- y caos en los ingresos, lo que generó molestia en algunos puntos del Gran Valparaíso.

"Siento que hay mucho desorden, no se entiende bien hacia dónde avanzar, cómo se están dividendo las filas para las mesas determinadas y no abren las puertas del colegio, dejando las filas en la calle. Supongo que por la obligatoriedad vino más gente y desordenó más el asunto, porque nunca había visto esta cantidad de participación", reflexionó María Elena Poblete, electora que iba camino al liceo Juana Ross.

Respeto y democracia

Pese a la molestia, que no iba más allá de la desazón que generó el tiempo de espera, el proceso, en general, se llevó a cabo de forma respetuosa, sin generar altercados entre los electores, ni caos al interior de las cámaras secretas. Así lo confirmaron los delegados de local.

"Acá tenemos 18 mesas, más o menos con un padrón de 350 personas por cada una. Se constituyeron súper temprano, a las 08.30 horas ya las teníamos todas constituidas y efectivamente ha habido un gran volumen de personas que han llegado a este local de votación", precisó Felipe Torres, delegado del Liceo Juana Ross.

Quien añadió que, "en general, ha sido un proceso tranquilo. La gran mayoría ha tenido un comportamiento respetuoso, en el caso de los vocales también, son solo casos excepcionales que a la gente le molesta la espera o el frío, pero es algo que no podemos controlar".

Misma mirada que entregó Marcelo Villarroel, asistente del delegado del liceo Eduardo de la Barra. "Ha sido un proceso bastante bueno, bastante gente; la constitución de mesa fue lo más rápido, como nunca las 11 mesas estuvieron listas a las 08.20 horas. Adentro ha estado todo fluido, no ha habido ningún problema grave y no ha parado el movimiento en ningún momento", puntualizó.