Vigencia de Inés Valenzuela Presidente Sociedad de Folclor Chileno
Por Yvaín Eltit
Hay mujeres que son protagonistas de nuestras artes, las que no necesitan monumentos, su sola presencia nos llena la vida, una de ellas es la señora Inés Valenzuela Arancibia.
Nació en Constitución, Región del Maule, el 20 de junio de 1925. Hija de Ramón Valenzuela Rodríguez y Lucila Arancibia Oviedo.
Estudió en el Liceo de Constitución y Periodismo en la Universidad de Chile.
Se casó con el escritor Diego Muñoz Espinoza, tuvieron dos hijos: Josefina y Diego.
Trabajó por varios años en la Biblioteca Nacional, compartiendo con artistas e intelectuales, entre ellos sus amigos Juvencio Valle, seudónimo del poeta Gilberto Concha Riffo, la pintora Delia del Carril Iraeta, el poeta Pablo Neruda, el folclorólogo Oreste Plath, este último en "El Santiago que se fue. Apuntes de la memoria" p. 228 confidencia: "Augusto D'Halmar en el departamento de Silvia Thayer, ahí murió, estaba pobre. Allí, más de una vez departimos con Inés Valenzuela, hoy presidenta de la Sociedad de Escritores de Chile (SECH)".
Presidenta de la SECH entre 1995 y 1997.
Escritora y periodista colegiada. Escribió libretos para señeros programas radiales de temática rural y social del país, como "Alléguese al campo", "El huaso Banderas" y "Un amor en Río Verde".
Publicó artículos en los diarios El Siglo, La Nación, entre otros.
Perteneció a la Alianza de Intelectuales de Chile.
Junto a su marido investigaron la poesía popular desde una perspectiva objetiva y detallada. Una categoría de nuestro folclor chileno que se creía extinta, no solo impulsaron su recuperación, sino que institucionalizaron tal esfuerzo, fundando la Sociedad de Poetas Populares de Chile, el 11 de abril de 1953.
Desarrollaron el I Congreso Nacional de Cantores y Poetas Populares, con el auspicio de la Universidad de Chile, y su rector Juan Gómez Millas, en abril de 1954.
Participaron más de 300 expositores nacionales, creándose la Unión de Poetas y Cantores Populares de Chile, asociación gremial presidida por la payadora Águeda Zamorano Castañeda.
Un ámbito importante es que don Diego y la señora Inés respetaron lo genuino de la lira popular, no la reescribieron al estilo culto como se hizo a inicios del siglo XX. Ejemplos chilenos son como tamién (también), pa (para), pauto (pacto), na (nada) o formas verbales como sentís, sabís, tenís.
De sus obras destacan: "Las tierras pobres", Segundo premio del Teatro Experimental de la Universidad de Chile, aún sin estrenar; "El mundo que tía Paty dejó", novela (1974), y "Décimas de doña Inés Valenzuela" (2020).