Café viñamarino trae idea de Japón de interactuar con gatos
Los protagonistas del espacio temático tienen turnos de descanso y una veterinaria disponible 24/7. Son rescatados por fundaciones y ahora viven ahí. Clientes tienen tiempo máximo de permanencia para hacerles cariño y jugar
Camila Rojas Vargas - La Estrella de Valparaíso
"Las personas pueden venir acá a tomar un cafecito y comer algo rico. Mientras esperan su pedido pueden interactuar, hacerles cariño y jugar con ellos, toda persona que viene sale más feliz de lo que entró porque los gatitos son una dosis de serotonina y dopamina absurda". Ese es el concepto de "MiauMore Cat Café Viña" en voz de su dueña, Natalie Avilán.
Blanki, Mausy, Lemmy, Nino y Mechi son los nombres de los gatitos que están en el espacio ubicado en calle 5 Oriente 440 A, entre 5 y 7 Norte en la Ciudad Jardín. Todos ellos fueron rescatados por distintas fundaciones de la región y hoy viven ahí, "nosotros queremos fomentar y enseñar al público que los gatos deben ser indoor (interior) por su seguridad y bienestar. La diferencia de vida con un gato outdoor (exterior) es de nueve años, o sea pueden vivir hasta 17 años", indicó Avilán.
Al entrar, se les entrega a los clientes una serie de reglas, el tiempo máximo por ejemplo, que es de 70 minutos de permanencia y en interacción con los gatos. Al terminar ese tiempo, ellos descansan de los humanos por 20 minutos. No está permitido jugar bruscamente con las manos con ellos, solamente hacerles cariño y darles mucho amor, eso sí, se pueden utilizar juguetes como ratoncitos de felpa que se encuentran en el local.
Además por temas de seguridad para evitar accidentes, solo se admiten niños de 10 años en adelante y bebés en brazo de sus tutores. Desde la administración comentan que lo ideal es hacer reserva previa si van clientes en grupos.
"Tenemos una terraza cerrada y un espacio interior donde clientes y gatitos pueden estar libremente. Nosotros contamos con una veterinaria y una etóloga de cabecera para su atención y cuidados", indicó la mente detrás del concepto que se instaló en Viña en agosto de este año.
Natalie Avilán es colombiana, originaria de Cartagena de Indias, amante de los viajes. En su vuelta por Asia (Japón, China y Tailandia) quedó impresionada del concepto "cat café" que combinaba su amor por los felinos y su gusto por el buen grano de café, así llegó de vuelta a Viña con la idea de poner el negocio.
Esta amante de los "michis", vive en Población Vergara desde 2007, cuando cursó un magíster en Gestión de Organizaciones en la Universidad de Valparaíso, pero se aburrió de su trabajo corporativo y decidió emprender.
El menú es bien variado en el espacio, hay delicias dulces de manjar, mermelada, pie de limón, pie de maracuyá, postres helados, bebidas calientes, té de hierbas de diferentes sabores, todo absolutamente todo tematizado en los "michis".
Los pastelitos y galletas de Hello Kitty y Garfield son, por lejos, los más vendidos, aunque los alfajores de Meowth de Pokemón no se quedan atrás.
Los nombres de los productos también son un guiño, o más bien un "miau" a los felinos protagonistas, por ejemplo, en la carta es posible encontrar el café "Miauspresso", el "Black cat", el "Catpuccino", el "Mocatccino" y el "Maolatte".