Secciones

  • Portada
  • Actualidad
  • Deportes
  • Tiempo Libre
  • Estrellas

La Bienal Internacional de Arte de Valparaíso prepara su retorno

Entre 1973 y 1995, se realizaron doce versiones de este importante encuentro cultural, que luego cayo en el olvido. Hoy una comisión trabaja para recuperar el evento y volver a realizarlo en 2024.
E-mail Compartir

Marcela Küpfer C.

En el catálogo de la IX Bienal Internacional de Arte de Valparaíso de 1989, el artista chileno Hernán Puelma escribía: "Hablemos de mañana y digo, señores alcaldes del futuro, artistas, críticos y medios de difusión: la Bienal deberá amplificarse, confrontar y re-dimensionar sus actuales estructuras. Nos motiva una sola pasión: ARTE con mayúscula. Para eso, urgen grandes bienales con re-sonancia".

Lamentablemente, las palabras del artista Puelma caerían en el olvido: solo unos años después, en 1995, la Bienal Internacional de Arte de Valparaíso dejaría de existir y todo el trabajo artístico y cultural iniciado en 1973, y que llegó a posicionar en la ciudad en el circuito internacional de bienales, comenzaría a desaparecer de la memoria porteña.

No muchos recuerdan aún las grandes exposiciones de esculturas que se realizaban en el galpón del sector de Yolanda, ni las muestras en la Galería de Arte de calle Condell o en el Museo de Bellas Artes en el Palacio Baburizza, décadas antes de su restauración. Tampoco se ha escrito mucho sobre la Bienal de Valparaíso, que llegó a tener doce versiones y por donde pasaron destacados y vanguardistas artistas internacionales y nacionales.

Pero hay quienes no solo luchan contra el olvido, sino que están dispuestos a traerla de vuelta. Entre ellos, el artista porteño Henry Serrano, quien ha asumido la tarea de recuperar la Bienal Internacional de Arte de Valparaíso. A Serrano lo une un vínculo personal con la bienal -siendo apenas un adolescente, mandó una de sus primeras obras a la convocatoria-, pero sobre todo lo motiva el deseo de restaurar este dispositivo cultural y devolver a Valparaíso el lugar que ocupó alguna vez en el circuito internacional de bienales, donde están Sao Paulo, La Habana, Venecia, Berlín y más.

No está solo en este esfuerzo, al que poco a poco se suman actores públicos y privados. Pero lo más importante es que ya existe un compromiso explícito de que, para 2024, Valparaíso recuperará su bienal de arte.

Así lo dijo públicamente el alcalde Jorge Sharp en la reciente inauguración del Congreso Internacional de Críticos de Arte (AICA), en el Parque Cultural de Valparaíso, donde, ante expertos e invitados internacionales, el jefe comunal ratificó la voluntad del municipio de recuperar la bienal para el primer semestre de 2024.

El anuncio fue muy bien valorado, pues ratificó públicamente -y ante diversos actores que participan en los circuitos internacionales del arte- el trabajo que, en forma silenciosa, se viene desarrollando desde hace unos dos años, con la creación de un Centro de Documentación y Archivo de la Bienal y la conformación por decreto alcaldicio de una Comisión Bienal, integrada por el área de Cultura del municipio, el Museo Municipal de Bellas Artes, el Parque Cultural de Valparaíso y la Mesa de Artistas Visuales.

Historia

La primera Bienal Internacional de Arte de Valparaíso se inauguró el 6 de septiembre de 1973, en el Museo de Bellas Artes del entonces llamado Paseo Yugoslavo, en el cerro Alegre. La iniciativa del alcalde Sergio Vuskovic terminaría abruptamente cinco días después, el 11 de septiembre, cuando la bienal fue clausurada por las autoridades del gobierno militar impuesto a través del golpe de Estado. Las obras quedaron "secuestradas" durante meses, hasta que en noviembre las nuevas autoridades permitieron la reapertura de la bienal y mantuvieron vigente el evento en sucesivas versiones.

"A mi juicio, la bienal fue uno de los eventos culturales más importantes de la región durante todos los años 70 y 80. Fue un dispositivo cultural relevante que definió la genealogía de lo que fue el arte chileno de los 80 y 90, si trazamos quiénes participaron ahí y vamos tirando líneas con la escena chilena del arte contemporáneo. Fue el único evento cultural sistemático que estaba asociado a una ciudad", señala Serrano.

Paradójicamente, la bienal se mantuvo activa durante todos los años de dictadura y fue ya en democracia cuando dejó de existir. "La ironía está en que la bienal se expresa con más recursos y de manera muy importante bajo la dictadura militar, con efectos internacionales muy relevantes, porque comienza a ser parte de un circuito donde estaban Sao Paulo, La Habana… Los datos son contundentes, Valparaíso pasa a ser parte de las redes de bienales. Sin embargo, con la administración de Hernán Pinto este evento es considerado como innecesario en términos de lo que le demandaba de recursos a la ciudad, pero también había mucha asimetría en la comprensión de este evento, no entendían bien que esto era importante", explica.

Con la excusa de la falta de espacios apropiados para las exhibiciones, especialmente de grandes esculturas que llegaban a la bienal, el evento se eliminó de la agenda de la ciudad y poco a poco cayó en el olvido. Tanto así que Henry Serrano ha tenido que realizar un trabajo de detective para recuperar documentación, archivos, catálogos y registros de las doce versiones, a fin de generar un conocimiento sistematizado respecto de la bienal.

Retorno

Con el paso del tiempo, la idea de una bienal porteña terminó por diluirse de la memoria de la ciudad, pero permaneció latente especialmente entre los artistas, quienes logran reinstalar el tema en los últimos años.

"En las elecciones municipales de 2016, se logra instalar en el programa del alcalde Sharp, es parte de sus compromisos de campaña. Producto de diversas situaciones, no se pudo cumplir el objetivo en el primer periodo, pero en este segundo periodo adquiere prioridad. Queda en el Pladeco (Plan de Desarrollo Comunal) y en el Plan Municipal de Cultura, dos instrumentos que validan y justifican la inversión y que además obligan a asignarle un presupuesto", explica Serrano.

Esta validación ha permitido avanzar en la constitución de la Comisión Bienal y en los lineamientos del evento de 2024. "Lo que se ha trabajado desde este punto hasta ahora es generar las condiciones para una curatoría general de la bienal y luego la invitación a tres curatorías específicas para abordar algunos temas que consideramos relevantes en la reactivación de la bienal", precisa Serrano. Estos son: feminismos contemporáneos, medio ambiente y ciudadanía.

La vocación internacional y de vanguardia se expresarán en la invitación a curadores internacionales, junto con artistas y expertos que participarán también en instancias de reflexión. "Queremos hacernos cargo de los grandes temas con las herramientas del arte", señala Henry Serrano, quien hace hincapié en que las actividades de la bienal no se limitarán a los espacios de exhibición (Parque Cultural de Valparaíso, segundo piso del Mercado Puerto y, si está recuperada para entonces, la bodega Simón Bolívar), sino que deberán necesariamente acercase a la comunidad en los territorios, con actividades en cerros y barrios.

Para preparar el desembarco de la bienal, durante 2023 se realizará una gran muestra itinerante que conmemorará los 50 años de la actividad. La exposición, con obras ganadoras de las bienales, recorrerá cinco comunas de la región, gracias a un fondo adjudicado por el Gobierno Regional. También se espera realizar una exposición con 50 mujeres artistas en el segundo piso del Mercado Puerto. "Lo que buscamos en generar muchas acciones para mostrar, conocer y entender que la bienal fue parte estructural de la ciudad en términos culturales y que la perdimos", reflexiona.

"Lo que buscamos en generar acciones para entender que la bienal fue parte estructural de la ciudad en términos culturales y que la perdimos".

Henry Serrano, artista