Por debajo de las expectativas estuvieron las ventas navideñas
Presidente de la Cámara de Comercio de la Ciudad Jardín asoció los discretos resultados al incendio en la parte alta y la presencia desbordada de los ambulantes.
La Navidad es sin duda una fecha esperada por los comerciantes. Se estima que en el último mes del año y siempre asociado a las fiestas de cierre, las ventas pueden llegar a triplicarse respecto de un año normal. De ahí que el gremio se prepare para afrontar esta mayor demanda, sin embargo, las expectativas este año se vieron satifechas parcialmente, alcanzando sólo un 25% de las ventas esperadas.
A juicio de Rodrigo Rozas, presidente de la Cámara de Comercio y Turismo de Viña del Mar, dos factores pudieron influir negativamente en las proyecciones: el lamentable incendio que afectó a las poblaciones de la parte alta de la ciudad y la masiva y desbordada presencia de ambulantes en las zonas comerciales.
"Claramente el comercio se revitaliza en el mes de diciembre a propósito dela Navidad. Prácticamente son tres meses de ventas lo que el promedio proyecta, las diferentes categorías de negocios, es decir, casi un 300% de crecimiento y la verdad es que en esta oportunidad las proyecciones no anduvieron bien. Lamentablemente tuvimos dos situaciones complejas: primero y sin duda, la tragedia del incendio en la parte alta y la altísima presencia de ambulantes, lo que significó que tuvimos un 20% de decrecimiento de las ventas respecto de un período navideño", precisó el dirigente gremial.
Para Rozas, el desborde del comercio informal generó dificultades para el tránsito de los clientes y el acceso de los mismos hacia las galerías.
"Porque al parecer los ambulantes obtuvieron título de dominio de las veredas y eso genera una situación de embudo, genera intranquilidad y no propicia que el cliente pueda andar vitrineando o visitando locales comerciales. A eso se suma la sensación de inseguridad permanente", acotó el dirigente.
El cierre
Rozas recordó con nostalgia cuando antaño se cerraba la calle Valparaíso y se convertía la zona en boulevard, con el objeto de favorecer el desplazamiento a pie de los clientes.
"No se ha podido cerrar por el temor de lo que podría pasar si se hace (...) El cierre significaba una gran cantidad de consumidores en el sector y facilitaba las compras. Lamentablemente estos últimos años no se ha podido cerrar por la realidad del aumento delcomercio ambulante. Esa es la única causa", reconoció Rozas.
Revisar planes
Los negativos resultados del comercio detallista obligan a evaluar los planes de seguridad implementandos en las zonas comerciales.
Rodrigo Rozas adelantó que pedirán reunirse con el municipio y Carabineros para poder evaluar en conjunto los planes implementados en materia de seguridad, en particular el llamado "plan de copamiento".
"Este plan debe involucrar a otros servicios también, el Servicio Nacional de Aduanas, Salud, pero si no se incorporan todos, no sirve, no es un buen plan", afirmó.