Artesanos de av. Perú quieren contar con respaldo municipal
Manufactureros suman varios años vendiendo sus artesanías en el tradicional paseo viñamarino, sin embargo, no cuentan con permiso para trabajar. Ordenanza les exige contar con toldos y certificados de residencia en la comuna.
Gian Franco Giovines - La Estrella de Valparaíso
Desde hace seis años, Teresa Reyes Oyanedel (57) se levanta cada día a primera hora de la mañana; hace sus bolsos, su mochila y, gracias a la gentileza de un cercano que la lleva de paso en automóvil, emprende rumbo a la avenida Perú, donde se instala desde las ocho de la mañana para vender sus artesanías en el paseo viñamarino.
Motivada por el amor que le inculcó su madre por esta labor, en 2016 Teresa Reyes decidió dedicarse por completo al cultivo y venta de plantas suculentas y cactus, subtipos vegetales que no necesitan de grandes cuidados para subsistir.
El proceso de Teresa es minucioso. Cada una de las plantas es cuidadosamente cultivada en su hogar. Ya cuando adquieren el tamaño suficiente, son trasplantadas hasta unas tiernas macetas, las que son hermoseadas con cuarzos y piedras de todos colores.
"Esto es lo que me apasiona. Siento que así le dejo algo lindo al mundo", dice la viñamarina.
Sin embargo, a pesar de la constancia y la minuciosidad de su trabajo, Teresa Reyes es parte de un grupo de 40 artesanos de avenida Perú que al día de hoy no cuentan con los permisos municipales para vender sus productos en el paseo costero, por lo que se exponen a ser desalojados por las autoridades.
Piden regularizarse
Héctor Campos Campos (62), oriundo de Valparaíso, es presidente de la Agrupación de Artesanos Emprendedores Productores de avenida Perú, una organización con ocho años de antigüedad y 40 comerciantes adheridos.
Tras casi una década desempeñándose como manufacturero de letreros de madera, ha sido desalojado en varias ocasiones por fiscalizadores, por lo que el dirigente decidió postular, junto a su agrupación, al patrocinio municipal, a través de una solicitud al Departamento de Desarrollo Económico.
"Nosotros supimos que la administración nueva iba a incluir a los artesanos del borde costero. Entonces nosotros nos presentamos para ver cómo nos podíamos organizar para tener un permiso", comenta Héctor Campos.
Sin embargo, la resolución de la solicitud fue negativa: "Fuimos a hablar con el municipio, pero nos encontramos con esta ordenanza que dice que cualquier feria que ellos patrocinen tiene que tener toldos blancos y pueden estar solo ciertos días", detalla Campos, quien argumenta que "si ponemos toldos en avenida Perú sería demasiado invasivo. Aquí la gente viene, se saca fotos y pasea".
Además, según establece la ordenanza de la municipalidad de Viña del Mar -publicada el 12 de agosto de 2022-, las organizaciones que deseen postular a una feria de emprendimiento con patrocinio municipal deben tener entre sus integrantes un 80% de residentes de la comuna, requisito con el que no cumplen los artesanos de avenida Perú, por lo que se ven obligados a seguir vendiendo al margen de la norma.
"Lo que nosotros pedimos es que nos puedan dar un permiso, para cuando venga Carabineros o vendedores ambulantes con mercancía de dudosa procedencia, los retiren a ellos y no a nosotros", esgrime Héctor Campos.
No quieren toldos
La artesana Teresa Reyes deja en claro que "nosotros igual queremos tener un orden. Si nos llegaran a dar un permiso para estar en el muro, vamos a ponernos con manteles y quitasoles blancos, lo más similar a lo que nos exige la municipalidad", argumenta, sosteniendo además que las exigencias de la ordenanza municipal no tienen en cuenta a los emprendedores de bajos ingresos.
"Acá no están los recursos para comprar un toldo. Uno de 3x3 metros sale hasta 50 mil pesos. Nosotros tenemos artesanos que venden 10 mil o 20 mil pesos al día", asegura.
María Adela Baeza, vecina de avenida Perú, le entregó su apoyo a la agrupación: "Es importante que se regularice a los artesanos que hacen verdaderamente sus artesanías. Se les debe permitir vender sus productos regularizados", señala, añadiendo que "es obvio que no quieran aceptar los toldos blancos, porque ocuparían mucho espacio de la vereda, siendo este un paseo familiar".
Consultado por este medio, el concejal René Lues señaló que no es partidario de crear nuevos espacios para el comercio en las calles de Viña del Mar, argumentando que "la experiencia nos indica que detrás de las autorizaciones (...) viene como consecuencia negativa la llegada del comercio ilegal que desnaturaliza esos espacios, los copa y los llena de incivilidades", indicó.