Francisca Palma Schiller

Luego de enterarse a fines de enero que su colegio será "dividido" a decisión del Servicio Local de Educación Pública de Valparaíso (SLEP), la comunidad educativa de la Escuela Gran Bretaña no ha descansado para que aquello no se convierta en una realidad.

Según explicaron los apoderados en la oportunidad, el Servicio les informó que ante las necesidades que posee el establecimiento educacional en términos de infraestructura, algunos alumnos deberán ser trasladados hasta el Liceo Barón, mientras que otro porcentaje se mantendrá en las actuales dependencias. De esta manera, la decisión fue catalogada de "unilateral y autoritaria".

Ante la molestia, la comunidad ha iniciado una serie de conversaciones con autoridades locales para así, evitar que la idea planteada por SLEP se concrete.

"Estamos haciendo varias gestiones tanto a nivel comunal, regional y gubernamental. Primero que todo para detener la división del colegio y segundo, para obtener un establecimiento en forma definitiva, que eso significa la compra de un terreno o quizás un establecimiento que haya que adaptarlo para las necesidades de nuestros estudiantes", explicó Glysna Figueroa, apoderada de la escuela Gran Bretaña.

Conversaciones

Frente a esta oposición, este viernes fueron recibidos por el alcalde de Valparaíso, Jorge Sharp.

"Nos manifestaron la preocupación que tienen por la decisión que ha tomado el SLEP de dividir la Escuela; nosotros nos sumamos a sus demandas y de hecho, vamos a trabajar junto a ellos para la búsqueda de una casa, un terreno o en su defecto, una escuela en desuso, como la escuela Ernesto Quiroz Weber, para que la escuela Gran Bretaña tenga, definitivamente, la infraestructura y el lugar que les corresponde como educación especial. Los niños y niñas de la Escuela Gran Bretaña no son menos que el resto de los niños y niñas de Valparaíso", indicó el jefe comunal.

En suma a este diálogo, los apoderados también se reunieron con el seremi de Bienes Nacionales, Tomás Covacich.

"En este encuentro, nos solicitaron un nuevo espacio, ante la urgencia de no contar con un proyecto educativo donde puedan matricularse una gran parte de los alumnos y alumnas. Las familias han luchado por décadas en la visibilización de niños, niñas y adolescentes y las diversas condiciones de sus hijos e hijas, dando cuenta de la necesidad de una perspectiva y enfoque desde y hacia la inclusión. Por ello, nos comprometimos a realizar todos los esfuerzos para buscar y encontrar un terreno, y haremos todo lo que esté a nuestro alcance para tenerles una respuesta", declaró la autoridad.

"Sin embargo, esta es una tarea difícil y será complejo encontrar lo que buscan, por la baja disponibilidad de suelo fiscal en la región de Valparaíso y las características con la que debe cumplir el espacio. Si bien es probable que no tengamos una respuesta favorable en el corto plazo, sabemos que se trata de una necesidad urgente y los tendremos en consideración prioritaria, articulando con otros servicios y organismos la posibilidad de encontrar este espacio junto a otra institución", añadió.

Un nuevo espacio

Similar a su versión anterior, desde el Servicio Local también entregaron declaraciones al respecto. Para SLEP también está el compromiso de habilitar un nuevo espacio.

La decisión -de trasladar a un porcentaje de los estudiantes al liceo Barón-, se suma al compromiso de "contratar el personal necesario (profesores y asistentes de la educación) para resguardar los procesos educativos de nuestros estudiantes, mantener el servicio de transporte escolar y, lo más importante, comenzar durante este 2023 con la elaboración de un proyecto que busque habilitar un nuevo espacio que logre albergar la gran cantidad de estudiantes que hoy requieren una escuela especial en la comuna de Valparaíso".

"Es importante hacer presente que por este incremento de matrícula el Servicio Local no recibe subvención, sin embargo, ante el actual escenario y la urgente necesidad de dar respuesta a nuestros estudiantes, es imposible quedarse inmóviles y no buscar la mejor solución para brindar un servicio educativo de calidad", aclaró el director ejecutivo (s) del Servicio, Daslav Mihovilovic.

45 alumnos deberán trasladarse a un espacio anexo del liceo Barón una vez que comience el año escolar.

En Alerta epidemiológica están todos los establecimientos de salud de la región de Los Lagos, por el explosivo aumento de la enfermedad denominada "tifus de los matorrales".

Se trata de un diagnóstico emergente pero que preocupa porque durante este año ya se han reportado 12 casos, mientras en todo el 2022 fueron apenas 5.Se trata de una patología que se ha dado principalmente en Aysén y Los Lagos, generada por la mordedura de un ácaro que está en contacto con la leña y la vegetación.

La encargada regional de Zoonosis, Alejandra Beltrán, explicó que la probabilidad de contraer la enfermedad aumenta para personas que trabajan en construcciones de casas o trasladan leña.

"Muchas de las lesiones se dan en los brazos y en el tórax (…) En el lugar de la piel que esté descubierto puede ingresar este ácaro e inocular el agente", detalló Beltrán.

La seremi de Salud, Karin Solís, dio cuenta del origen de este ácaro y algo muy importante: la sintomatología para identificarlo de inmediato.La autoridad detalló que el cuadro clínico produce "fiebre y dolor de cabeza. Lo más importante, es un sarpullido en la piel, una ostra que se produce en zona de inoculación.