Concejales insistieron en poca variedad de parrilla
Sandro Puebla y Carlos Williams, miembros de la comisión a cargo del Festival de Viña del Mar, lamentaron una mayor diversidad en la oferta de artistas.
Luis Felipe Ávila Laferte - La Estrella de Valparaíso
El exceso de cantantes enfocados en un público juvenil ha sido uno de los aspectos más criticados de esta versión del Festival de Viña del Mar. Lejos de tener una amplia gama de nombres para todas las edades, esta edición del certamen viñamarino puso su foco en los oyentes de más jóvenes, marginando a una cantidad importante de personas que se vieron decepcionadas por no encontrar artistas de su gusto.
Un error que no ha dejado indiferente a nadie, y menos a los concejales pertenecientes a la comisión a cargo del festival.
"Me habría gustado ver más variedad en el espectáculo. Una mayor diversidad entre los artistas habría permitido llegar a un público más amplio", señaló Sandro Puebla, En tanto Carlos Williams Arriola, también parte de la comisión festivalera, añadió que "ha sido una parrilla que dejó fuera a un grupo etario considerable de la población que estaba acostumbrada a que el festival fuera algo familiar".
Jurado y competencia
Respecto al jurado designado para la competencia internacional y folclórica, la organizacíon tampoco se ha librado de los cuestionamientos. Así como también de la decadencia en la que ha caído esta sección del festival, teniendo cada vez menos vitrina.
"Me habría gustado ver jueces más técnicos e internacionales, ya que esta plataforma es utilizada por los canales para promocionar los rostros y sus programas. Hay que hacer cambios para que ambas competencias ocupen un lugar relevante en el festival y se puedan destacar las canciones que se muestran allí", comentó.
Frente al tema de la competencia, Puebla agregó que "en este aspecto estamos al debe hace rato. Esto es algo que debería potenciarse y que Viña vuelva a ser un trampolín para artistas emergentes".