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[Cultura Urbana]

Libro relata la odisea del Winnipeg en la voz de su tripulación

El escritor Jaime Ferrer, descendiente de los refugiados españoles que llegaron a Chile en 1939 huyendo de la persecución tras la Guerra Civil, recoge la experiencia de Emile Sellon, el jefe de los marineros del barco.
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Juan Guillermo Prado - La Estrella de Valparaíso

Cuando por las noticias nos enteramos de la tragedia de los migrantes venezolanos y de otras nacionalidades que están en la frontera chilena-peruana, pareciera que, a pesar del tiempo, nada ha cambiado. ¿Qué peripecias debió haber pasado el poeta Pablo Neruda para traer a Chile a más de dos mil refugiados republicanos de izquierda que huían de la persecución tras la cruenta Guerra Civil que arrasó con España?

Tenían que llegar a Chile, pero para eso había que conseguir un navío capaz de efectuar un largo viaje, en plena II Guerra Mundial. El barco elegido fue el Winnipeg, que tenía capacidad para un centenar de pasajeros. Pero había que habilitarlo y se modificó en los astilleros de El Havre.

Una mañana del verano de 1939 se hizo a la mar el barco. El viaje se realizó a través del canal de Panamá y arribó a nuestras costas después de un mes de navegación. La posibilidad de que fuera atacado por los submarinos alemanes hizo que navegara cerca de la costa y sin luz.

Un descendiente de estos refugiados es el escritor Jaime Ferrer, quien en 1989 publicó el libro "Los españoles del Winnipeg, el barco de la esperanza". Fue el primer investigador en rescatar del olvido este pasaje de la historia que vincula estrechamente y para siempre a Chile con España.

La voz de la tripulación

Hoy es el mismo Jaime Ferrer quien nos sorprende con la publicación de su segundo libro sobre la temática, aportando antecedentes inéditos de aquel viaje. Sin embargo, esta vez lo hace relatando aquella travesía desde la perspectiva de la tripulación del barco, más precisamente de la experiencia vivida por Emile Sellon, el jefe de los marineros del Winnipeg.

El resultado es tan sorprendente como apasionante ya que, a través de la narración, escrita en un estilo ágil y ameno, nos vamos enterando de las variadas maquinaciones que el comandante de la nave, el capitán nazi Gabriel Pupin, realizó desde antes del zarpe en el puerto para abortar la llegada a Chile de los más de dos mil españoles seleccionados entre una masa de medio millón de personas.

Con lo dicho en el párrafo precedente, el lector ya puede intuir por dónde va el relato del libro que Jaime Ferrer nos entrega: "La travesía del Winnipeg narrada por su tripulación", que será presentado el próximo jueves 11 de mayo a las 19.30 horas en el salón Lope de Vega del Estadio Español de Viña del Mar, con la cooperación del Consulado de España en Valparaíso, la Corporación Amigos del Winnipeg y la Asociación Social y Cultural Winnipeg de Valparaíso.

Mención especial requiere la dedicatoria donde el autor señala que, sin la participación de cada una de las personas a quienes está dedicado el libro, la llegada a Chile de "los dos mil del Winnipeg" no hubiera sido posible.

El libro está dedicado a Pedro Aguirre Cerda, Pablo Neruda, Abraham Ortega y Emile Sellon, a nuestro juicio un justo homenaje, especialmente en lo que se refiere al entonces ministro de Relaciones Exteriores de Chile, Abraham Ortega Aguayo, quien no había sido valorado adecuadamente en otras publicaciones sobre la temática.

Desde otro ángulo, el autor de la obra Jaime Ferrer Mir nos permite aquilatar el valioso aporte que ha significado para Chile la inmigración recibida de tantas culturas a lo largo de nuestra historia.

Critica de Arte

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por Daniel Santelices

Pequeño grabado (II parte)

Continuamos con la segunda parte de la exposición bienal con la obra a puntaseca de Catalina Reyes, la cual define, mediante los bordes sobresalientes que quedan en la matriz al hendir -con muy buen dominio- la herramienta, el contorno de las figuras humanas. Rubén Fernández trabaja en perspectiva, resolviendo con precisión diferentes imágenes. Gonzalo Bravo distorsiona las figuras en un interesante juego formal. De igual modo acontece con Gabriel Castillo y con la síntesis de arquitectura que graban Ornella Miano y Estrella Aguilera. Valentina Pérez, Álvaro Ehijo, Jonás Vergara, Isaac Villaloba, Inés Acevedo, experimentan por diferentes caminos para lograr una obra en vías de ir consolidándose.

Gofrado y transfer: Elena Calderón extrae fotos de diarios y acciona en la matriz repujados que crean una trama sobre lo transferido, con un buen despliegue técnico. Serigrafía: Karem Baradit forma franjas verticales alternadas de abstracciones, ya sea con el tradicional bastidor de seda -reemplazada habitualmente hoy por una delgada rejilla de metal- centrada en el proceso técnico de impresión que demanda dominio.

Buril y aguatinta: Gerardo Saavedra actúa sobre la matriz con trazos experimentales dinámicos que atraen por su espontaneidad. Collagraf, Frottage y chinecolle: Merlín Serrano con diferentes técnicas afines, pega flores y tallos, frota y traspasa de esta matriz previamente entintada, al papel con presión de tórculo, logrando una muy buena imagen, con un frescor naif, infantil. Linografía: técnica asociada al grabado en madera, forman un grupo donde todos ellos crean con diferentes imágenes y despliegan su dominio técnico y propositivas obras. Así sucede con Martín González, cuyo pretexto es un árbol o maderos cruzados; Cristian Mora lúdicamente dispone cabezas; Isidora Villalobos trabaja con alto contraste y uso de colores planos, de muy buena resolución; Danna Leal dispone sobre un fondo psicodélico, una juguetona rata, con trazos decididos.

Calcografía: Constanz Cruz recurre a planchas de cobre que entinta en profundidad y que, como figuras indeterminadas muy potentes, crean una atmósfera asociada a una de las etapas goyescas. Litografía casera: Esteban Flores con obras de finísima textura y elegante tratamiento de trazos tenues, intervenidos con lápiz graso. Margarita Rojas expone Andantes furtivos. Personas anónimas en un ritmo ciudadano y destino incierto, crea con las tintas una atmósfera sugerente que es, a la par, hermética, de muy buen oficio. Finalmente cabe sistematizar identificaciones al pie de obra. Bienal de buenos augurios y éxito.

expo: I Bienal de Grabado en Pequeño Formato

ARTISTA: muestra colectiva

SALA: Sala Viña del Mar