Mauricio Toledo - La Estrella de Valparaíso

El vínculo que la Región de Valparaíso tiene con el servicio ferroviario incrementa cada vez que sus antiguos y nuevos usuarios tienen la posibilidad de subirse al nostálgico automotor AES-11, siendo ayer, el Día de los Patrimonio, la gran oportunidad de recordar sus memorias.

Los más de 30 años que estuvo al servicio de la región, haciéndose cargo incluso de la ruta Santiago- Valparaíso, los catalogan como la piedra angular del actual moderno servicio y la conectividad entre el valle del Marga Marga y el Puerto.

María Alicia Sánchez, gerente de Pasajeros de EFE Valparaíso, compartió las emociones que evoca el automotor comentando que "hoy (ayer), haciéndolo andar un par de veces, la gente va feliz arriba del tren (...) y lo recuerda contando sus historias de cuando viajaban o de como les cortaban el boleto".

El trayecto ininterrumpido desde estación Puerto a Portales evocó en sus pasajeros emociones intensas que más de una lágrima generaron en sus vaivenes. Algunos compartieron sus experiencias con quienes nacieron después del cese de sus funciones.

Catalina Medina, oriunda de Belloto, llevó a su pequeña hija a conocer el tren, traspasando su experiencia adquirida a la misma edad que tiene hoy su retoña.

"A mi hija le gusta andar en tren, pero cuando lo vio se asustó un poco porque es diferente. Ahí le dije que yo de niña andaba en este tren y ahí dijo que quería subir, y súper feliz venía mirando por las ventanas abiertas, algo nuevo para ella", nos contó.

El responsable de sus dos coches, Joaquín Magnere, conductor del AES-11 ayer, compartió su felicidad contando que "es un honor ser y representar la antigua profesión de ser conductor, que además de ser el encargado del tren; también tenía que revisar el pasaje de los pasajeros".

"Lo más maravilloso es ver a la gente feliz y contenta recordando el servicio que había aquí Valparaíso, en memoria de papás y abuelos que eran ferroviarios", añadió.