Todos entendemos la severa problemática que vivimos respecto de las renovaciones de licencias de conducir.

Personalmente, me aboqué a la tarea, con bastante preocupación. Ingresé a la página del Departamento del tránsito de la Ilustre Municipalidad de Viña del Mar. Obtener una hora para renovar la licencia significaba esperar 2 o tres meses. Sin embargo, la citada página web indicaba que cada día se entregan 15 números para adultos mayores, a partir de las 9:00 hrs.

El lunes 29 de mayo 2023, llegamos con mi esposa (ambos alrededor de los 70 años), a las 7:45 hrs. quedando en el puesto 25, obviamente, no obteniendo un número. Preguntando a quienes estaban entre los 15 primeros lugares, algunos(as) habían llegado a las 4:00, 5:00 y 6:00 de la mañana.

Al día siguiente, llegamos a las 6:00 de la mañana, quedando entre los 15. Permanecimos, en la vereda por dos horas y 45 minutos, resistiendo una brisa helada, que a pesar de ir bien abrigados, sentíamos con preocupación por nuestra salud.

A las 8:45 hrs. entregaron los números y pudimos hacer ingreso al lugar, logrando nuestro objetivo.

Las personas que NO pertenecen a la tercera edad, comenzaron a llegar a las 9:00 hrs., pues tenían hora agendada.

¿Cuántos adultos mayores, que hacen esta fila desde las 4:00, 5:00 o 6:00 de la mañana, han sufrido consecuencias en su salud?

Propongo, que la Municipalidad, a través del Departamento de Tránsito, cree un link especial para adultos mayores y que cada día, a las 12:00 hrs. se inscriba a 15 de ellos y que estos tengan que asistir el día siguiente, ojalá en la tarde y dándoles prioridad en la atención.

¿No merecemos un poco más de consideración los adultos mayores?

Eduardo Del Pino de la Fuente

Rut: 6.394.566-8

Como usuario habitual de los buses del recorrido cerro los Placeres, me llamo gratamente la atención la inusual buena atención del conductor de la máquina LGJV-40 a la cual subí el día 3-6-23( creí que me había equivocado de transporte).Por lo general la mayoría cumple su labor porque están obligados a hacerlo, pero muchas veces con un trato poco amable o despectivo. El conductor de la máquina citada, en todo el recorrido mantuvo un trato amable y cordial hacia todos los pasajeros , recibiéndolos con un saludo a la subida y un gracias a la bajada sin hacer distinción entre estudiantes, adultos mayores y resto de las personas. Conductores como el SEÑOR al que hago alusión, son las que dignifican al transporte público. Felicitaciones.

Jorge Valenzuela Araya

5014498-4