Presuntas negligencias habrían terminado con la vida de niña con parálisis
Madre indica que una caída al interior de su establecimiento educacional habría desencadenado la muerte cerebral de su hija de siete años, Emilia.
Destrozada se encuentra Teresa Salazar luego de que su hija Emilia, de siete años de edad, falleciera hace unas semanas producto, según denuncia, de una grave negligencia médica y escolar.
De acuerdo con lo manifestado por esta joven madre, Emilia nació con una parálisis cerebral, condición que la mantenía en una silla de ruedas, como también con la necesidad de asistir a una escuela especial, razón que la llevó a comenzar sus clases en marzo en el establecimiento dependiente de la Corporación Municipal de Quilpué, "Desarrollo Renacimiento".
La pesadilla, asegura, comenzaría el día 21 de aquel mes, fecha en la que su pequeña azota su cabeza contra el piso luego de que un compañero la empujara de su silla de ruedas. "Esta es la primera negligencia, ya que no se tuvieron los cuidados necesarios en la sala y no se trasladó de manera inmediata a un centro asistencial. ¿Dónde estaban las profesionales?", se pregunta Teresa.
Semanas más tarde, tras este golpe, agrega la madre, su hija falleció tras sufrir muerte cerebral. Asegura que el centro asistencial que vio el caso de Emilia, el hospital de Quilpué, no realizó los exámenes necesarios para diagnosticar correctamente a la menor.
"La llevé tres veces a urgencias del hospital de Quilpué, incluyendo el mismo día del incidente, y la dieron de alta las tres veces con diagnóstico de trauma superficial de la cabeza, sin embargo, ella comenzó con vómitos biliosos y dolores de cabeza posterior al día de la caída. La llevé por cuarta vez el día miércoles 29 marzo a urgencias del hospital, porque tuvo su primera crisis epiléptica fuerte. Queda hospitalizada por tres días y el día 31 de marzo le dan de alta. Posterior a tres horas dada el alta, mi hija vuelve a convulsionar muy fuerte… allí queda hospitalizada por 18 días", precisa Teresa, quien asegura que el diagnóstico de los médicos siempre apuntó a un dolor o virus estomacal, producto de los vómitos, y no a algo cerebral.
"Solicité una resonancia magnética para saber qué le estaba pasando a su cerebro, pero me lo negaron, es un procedimiento que nunca realizaron", agrega la madre.
Demanda en curso
En medio de este contexto, y tras nuevas crisis, en abril Emilia fue trasladada al hospital Gustavo Fricke, establecimiento que declaró su muerte cerebral. Días después, fue desconectada.
"Nunca tomaron su caso como urgencia neurológica, sino como algo estomacal, siendo discriminada por ser una niña en situación de discapacidad, no creyendo que pudiera comunicarse ni expresar su dolor. Con nuestro abogado representante, Alejandro Mendoza, empezamos con la querella criminal por cuasidelito de homicidio en contra de todos los que resulten responsables", asevera la joven.
Sobre la acción judicial en particular, el abogado expresó, a través de un video, que la querella fue interpuesta el pasado 1 de junio en el Juzgado de Garantía de Quilpué.