Claudio Morales Salinas - La Estrella de Quillota - Petorca

Desde el 18 de junio, o sea hace casi un mes, que los hinchas de San Luis no ven a su equipo en acción, ya que en la fecha anterior del torneo de la Primera B, el historiado partido ante Santiago Morning finalmente no se pudo jugar por la falta de estadio del equipo capitalino, que era local, y que no tuvo acogida en La Calera cuando intentó arrendar el estadio Nicolás Chahuán. Lo cierto es que la espera finalmente termina hoy para los fanáticos canarios y para el plantel que dirige el técnico Francisco Bozán, que también está con muchas ganas de volver a la cancha para recuperar el terreno perdido.

Y qué mejor que este regreso a la competencia sea en condición de local, con una asistencia que se espera sea masiva en el estadio Lucio Fariña, pues el duelo a jugarse a contar de las 19.30 horas (originalmente estaba programado a las 20.30), pondrá frente a frente en la carpeta sintética quillotana a los dos elencos que están de escoltas en el Ascenso con 30 puntos, solo a uno del puntero Deportes La Serena. Además, hay que hacer la salvedad que el conjunto amarillo tiene ese partido pendiente con el Morning, el cual fue aplazado para el miércoles 2 de agosto, y que todavía no tiene escenario confirmado.

Sangre en el ojo

Se trata de un partido de relevancia para San Luis, pues el deseo del equipo es recuperar la punta del torneo, ya que el ganador de esta tarde escalará a la cima, al menos hasta el lunes, que es cuando juega su partido La Serena, de local ante Santa Cruz.

Pero el choque de hoy también tiene el condimento de la bronca con que se vino el cuadro canario desde Iquique cuando jugaron en la primera rueda, ya que aquella vez, en el Tierra de Campeones, el elenco de Bozán estuvo ganando por dos a uno y tuvo para asegurar la victoria, pero esa vez el arbitraje localista que los llenó de tarjetas amarillas y rojas, más dos goles al final de los dragones celestes, terminaron con los quillotanos sufriendo una derrota que no estaba en los cálculos, ni se ajustó demasiado al trámite de ese cotejo.

Luego de ese partido, y en el transcurso del campeonato, el conjunto iquiqueño experimentó un bajón del cual ya salió, y ahora viene con la moral muy en alto tras vencer en la fecha pasada a su clásico rival, San Marcos de Arica.

Los canarios además pretenden recuperar la fortaleza en su estadio, ya antes del receso forzado que tuvieron, cayeron en casa ante San Felipe.