"A los cuatro años ya se internalizan los estereotipos de género"
La sicóloga Carla Ljubetic, de la fundación Niñas Valientes, creó la organización en 2018 con el firme objetivo de combatir las desigualdades de género y entregar herramientas de educación socioemocional. El proyecto busca promover la equidad desde la primera infancia, pues "la mayoría de los avances en la materia siempre han estado enfocados en el mundo adulto".
No somos solo una sociedad donde las inequidades entre hombres y mujeres -aunque cada vez más visibilizadas- están lejos de superarse por completo. También somos una cultura sumamente adultocéntrica, en un contexto donde "a los cuatro años ya se internalizan los estereotipos de género", según denuncia la directora de la Fundación Niñas Valientes, Carla Ljubetic.
Desde la etapa escolar, explica, las niñas se consideran menos capaces que sus compañeros en áreas como las matemáticas o las ciencias, pese a tener, objetivamente, las mismas habilidades. La razón, afirma la sicóloga, es que "no tienen referentes y les cuesta más imaginar su desarrollo laboral en estos espacios, entonces hay menor interés de parte de ellas".
Y se produce entonces una suerte de profecía autocumplida, pues no se dedican a estas áreas por percibirse menos preparadas. La máster en Salud Mental Comunitaria reconoce que las mujeres se ven fuertemente afectadas en su adultez por estos estereotipos: "De alguna manera las desigualdades ya las han limitado en ciertas oportunidades de desarrollo o en elecciones de vida", afirma. Por esto, la fundación que encabeza trabaja desde temprana edad la educación con perspectiva de género, pues "necesitamos prevenir antes de que estas consecuencias ocurran, y eso debemos hacerlo desde la niñez", afirma.
Una medida que la profesional juzga imperativa, pues "la mayoría de los avances en la materia siempre han estado enfocados en el mundo adulto".
Paridad necesaria
Ljubetic también entrega su visión respecto a la paridad de género, una medida frecuentemente cuestionada en nuestro país por algunos sectores: "Es una medida necesaria por algo, no es antojadiza ni tiene que ver con la voluntad de un gobierno de turno, sino que responde a una situación objetiva sobre el acceso y ejercicio de la política".
También reconoce que la implementación de un sistema paritario significa un apoyo real, pues "muchas veces las mujeres logran entrar, pero después no tienen ningún tipo de soporte", declara.
Desde mayo de este año, Ljubetic es parte del Consejo de la Sociedad Civil de la Niñez del Ministerio de Desarrollo Social y Familia. Este órgano consultivo está constituido por nueve expertos y aborda políticas públicas y programas de la Subsecretaría de la Niñez. Su principal objetivo en este nuevo rol es "alinear los sistemas de protección de la niñez y establecer una nueva política nacional", explica, y agrega que "la idea es que podamos acompañar, orientar y poner puntos que consideramos claves".
Fundaciones
En cuanto a la reciente discusión sobre la naturaleza de las fundaciones originada por la controversia de Democracia Viva, la directora de Niñas Valientes destaca la importancia de las alianzas entre los organismos privados y la labor estatal: "El rol de las fundaciones debiese ir alineado con los objetivos sociales a nivel de Estado", y añade que "nosotras somos firmes creyentes del trabajo articulado y en red; no sirve que estemos trabajando en paralelo cuando podemos unificar fuerzas para fortalecer el impacto y el alcance".
Ljubetic sostiene que instancias como Niñas Valientes realizan labores que debieran ser cubiertas por el sector público: "Yo creo en lo que hace mi fundación, pero me encantaría que esta labor pudiera estar garantizada para todo el mundo", reconoce.
Aclara que esto se debe a algo sistémico: "Hoy día el modelo económico, social y político que tenemos, impide que el Estado garantice aquellos derechos".
La profesional comenta también sobre la importancia de la Ley de Educación Sexual Integral (ESI) y define las enseñanzas actuales como deficientes: "Podríamos decir que la educación sexual que tenemos se basa en mitos, en miedos, en pornografía", expresa.
También desmiente concepciones erróneas sobre la ESI y asegura que "es pertinente a cada etapa del ciclo vital, lo que aprendemos a los 15 años no es lo mismo que aprendemos a los cinco y menos a los dos, pero durante todas esas edades estamos aprendiendo cosas".
La directora destaca la transversalidad que busca la ley de ESI: "La niñez de nuestro país pasa por el sistema educativo, entonces así se puede llegar a toda la población independiente de su realidad", considera. Admite que existen diferencias en la formación según el contexto socioeconómico, pero asegura que "si por lo menos se garantiza, se entregarán conocimientos que permiten tomar mejores decisiones respecto a proyectos de vida, porque de eso se trata también, de poder cuidarnos y de cuidar a otro", concluye.