Secciones

  • Portada
  • Actualidad
  • Deportes
  • Tiempo Libre
  • Estrellas
[Cultura Urbana]

Grabados que transitan desde la desobediencia a la desolación

El artista local Axel Ekdahl expone un total de 90 obras en la Galería Municipal de Valparaíso, con el título "Xilosofías", donde propone una crónica visual de Chile en el periodo que va del estallido al rechazo.
E-mail Compartir

Marcelo Macellari - La Estrella de Valparaíso

Xilosofías, un juego de palabras entre xilografía (grabado en madera) y filosofía, da el nombre a la muestra que Axel Ekdahl exhibe en la Galería Municipal de Valparaíso y el artista explica que "el título surge por esa idea de que el arte es un instrumento para hacer reflexión, más allá de lo estético. Es una forma de pensar la vida y hacernos las preguntas que nos permiten crecer como personas, como artistas y como sociedad. Es decir, cuestionarnos a través del arte".

Mientras que el subtítulo de la exposición es "Desobediencia-desolación", porque Ekdahl relata que "esta propuesta visual, en su idea original, pretendía ser una alegoría y un homenaje al pueblo de Chile en su proceso de emancipación. Hartos de abusos, corrupción y desigualdades, salimos a las calles en todo el país exigiendo una nueva Constitución. Por primera vez, el pueblo sería el protagonista y no un actor olvidado en estas páginas de la historia. Sin embargo, como todos sabemos, ese proceso fue mayoritariamente rechazado. A la luz de los resultados, esa épica sobre el estallido social y la obra que visualicé como una crónica visual de ese proceso, quedaron a medio camino, lo que probablemente hace que esta muestra no sea lo que originalmente debió ser, pero aquí está".

La muestra, que considera un total de 90 obras y que obtuvo un Fondart Regional en la categoría de Creación, se plantea, según el artista, como "una reflexión sobre los hechos ocurridos en Chile a partir de octubre de 2019, seguidos de la pandemia de COVID-19, toques de queda, militarización, cuarentenas sanitarias y prolongados confinamientos. Estos difíciles años brindaron un espacio de reflexión y creatividad productiva, permitiendo que las obras que presento cobren vida. Como artista y ciudadano, no podía estar enfocado en otra cosa".

La épica que no fue

Entre las obras exhibidas, donde está muy presente el imaginario visual de Valparaíso, se repite también la figura de un caballo, que representa "la épica del estallido y el proceso de la Constituyente como una carrera ganada -cuenta Ekdahl-, que fue una proyección quizás ingenua que hice tras ver tanta gente en las calles. Yo quería retratar una épica y me acordé mucho de la Sinfonía Heroica de Beethoven, dedicada ya no a las elites, sino al pueblo de Francia que se alzó. Mi trabajo recoge un poco eso. Sin embargo, después vino el desencanto del rechazo, pero también la importancia de cuestionarse y hacerse preguntas".

Para reflexionar sobre los hechos recientes del país, el artista, quien también es pintor, utiliza aquí el grabado porque "tiene la virtud de democratizar el conocimiento, la cultura y las bellas artes y conectar el público con sus realidades. Además, en nuestro país, la xilografía ha abordado históricamente temáticas y cuestiones sociales, plasmando en papel las historias y la memoria que suelen invisibilizarse. La xilografía es la técnica de grabado que más me ha influido, porque me gusta el rasgado y la fuerza de la madera".

Ekdahl, quien tiene su propio taller, Técnicas Obsoletas, agrega que "a través del grabado, en particular de la xilografía, extiendo una invitación a cuestionar la realidad, los acontecimientos recientes e históricos, y nuestro devenir social. De esta manera, nos encontramos en un diálogo abierto, formando un círculo en el que el espectador activo contempla, opina y, quiero creer, también disfruta de la muestra. Por eso dedico esta exposición a la gente que sigue desobediente y que persevera en las calles".

"Xilosofías. Desobediencia-desolación" es la primera muestra individual de grabados de Axel Ekdahl y se puede visitar hasta el 3 de noviembre en Galería Municipal de Valparaíso (Condell 1550), de lunes a viernes de 10.30 a 16.00 horas.

Critica de Arte

E-mail Compartir

Daniel Lagos Ramírez

Raúl Ruíz en Sala 2063

Hace pocos días se ha inaugurado una nueva sala de exhibición de Artes Visuales en la región. Se trata de la sala 2063 del Instituto de Arte de la Pontificia Universidad Católica de Valparaíso, ubicada en la sede Los Acacios, que desde entonces está abierta al público. Para dar pie a este nuevo espacio se ha montado la muestra: Raúl Ruiz: el ojo que miente. Siendo esta una Curaduría de Francisca García y Érik Bullot, que ha surgido de la colaboración entre la misma universidad y el Museo de la Solidaridad Salvador Allende.

Amalia Cross, docente de la institución y encargada de la sala, nos señala que en esta exposición, en particular, se muestran resultados de investigaciones que van más allá del ámbito académico tradicional al experimentar con un espacio abierto de aprendizaje, que promueva un mayor intercambio con la comunidad a través del ejercicio de la curatoría en una sala de exhibición. Esto busca generar una relación más dinámica entre la Universidad, el Instituto de arte PUCV, profesores, investigadores y estudiantes con los vecinos de Viña del Mar.

El connotado cineasta Raúl Ruiz (Puerto Montt 1940 - 2011), estuvo desde su infancia vinculado a nuestra región, creció en Quilpué. Estudió Cine en Santa Fe (Argentina). Posteriormente hizo clases en el Instituto de Arte de la PUCV, por ello esta exposición tiene además un sentido simbólico para la institución formativa, promoviendo su obra visual de la instalación que no es tan conocida como su producción cinematográfica y que en los años noventa el maestro estuvo presentando en diversos museos y centros de arte contemporáneo. Con esta propuesta el cineasta chileno transgrede la bidimensionalidad de su propio lenguaje tras la pantalla, y abre la posibilidad de vincular la temporalidad del cine a la obra objetual, proponiendo la posibilidad de este despliegue visual como una película performativa. La atmósfera del conjunto posee un cariz existencial. Los elementos de mayor dimensión (las camas) dispuestos en la sala con un foco de luz cenital, nos seducen y evocan sensaciones diversas; de alguna forma el ojo propende a ver o imaginar tras el velo una figura o entidad, mientras la tela se agita por la corriente de aire de los ventiladores, generando una palpitación particular complementada por diversas especias en sacos situados en un rincón, entre naranjas regadas sobre el piso. En la pared frente a las camas se dispone una pantalla con registro documental y una serie de fotografías donde aparece el maestro Ruíz en su labor creativa.

Invitamos a la comunidad a asistir los miércoles a las 18 horas durante octubre, días en que se proyectará en la sala de cine del Instituto de Arte PUCV una película de Raúl Ruiz.

Nombre: Raúl Ruiz: el ojo que miente

donde: Sala 2063

dirección: Los Acacios 2063, Miraflores bajo