Desde hace ya tres años Valparaíso trazó una hoja de ruta de desarrollo a través de su PLADECO y la actualización parcial del Plan Regulador Comunal PRC, sentando las bases de una estrategia de desarrollo local que permitiera pensar a Valparaíso, ya no desde la nostalgia del siglo XIX, sino de su presente y futuro en este siglo XXI.
Una hoja de ruta que se basa en principios de democracia territorial y una visión de desarrollo integral que permita la articulación en el territorio de la diversidad de vocaciones en materia medioambiental, económica, social y patrimonial, que respete el patrón histórico de asentamiento y reconozca la relevancia del maritorio y la integración entre el puerto y la ciudad.
Desde la última actualización parcial del PRC el 2019 a la fecha, hemos avanzado en el desarrollo de estudios de diagnóstico en materia de riesgo, equipamiento, vialidades, patrimonio natural y cultural, entre otros, así como una propuesta base que se adecúe a la normativa ambiental vigente y los desafíos del cambio climático en materia de ordenamiento territorial.
En este sentido, los últimos sucesos de desbordes de ríos y socavones, han puesto el tema de la regulación territorial como un tema importante no sólo en materia ambiental o de gestión del riesgo de emergencias y desastres, sino del proyecto de desarrollo neoliberal de nuestro país que se expresa desigualmente en las comunas.
La actualización del PRC en Valparaíso, tiene como desafío asumir el ordenamiento territorial, no sólo como la aplicación burocrática de diecisiete normas urbanísticas, sino como un proceso que permite el derecho a la ciudad por parte de las mayorías, en coherencia con el desarrollo económico, el patrimonio cultural y natural que posee nuestra comuna como claves para la ecuación del desarrollo porteño del siglo XXI.
En este sentido el PRC si bien es una invitación para pensar en las condiciones del futuro de Valparaíso, esta no puede ser entendida de manera aislada de la región y del país. El ordenamiento territorial es una oportunidad para transformar los territorios en unidades de sentido para las comunidades en todas sus escalas y que hoy más que nunca requiere de una constitucionalidad distinta, que se ajuste a la nueva normativa ambiental y al bien común.
Con esta visión queremos convocar, invitar y sumar a todas y todos los porteños a ser parte del proceso de actualización del PRC, que nos permita desde nuestra diversidad, historia e identidad, construir una ciudad justa e integrada con su tradición, pero abierta a la innovación y a la transformación y que desde su anfiteatro natural mira al mar como su horizonte de futuro, ese que combina la nostalgia de la joya con el futuro del pacífico del siglo XXI.
Jorge Sharp, alcalde
Alejandro Escobar, Secpla