Completamente noqueados. Santiago Wanderers sucumbió ayer ante el juego de Magallanes y especialmente frente a un intratable Joaquín Larrivey, desaprovechando una tempranera ventaja de dos anotaciones para terminar cayendo agónicamente por tres tantos a dos, resultado que además cortó la racha de tres victorias consecutivas con la que los porteños llegaban al Elías Figueroa Brander de Playa Ancha.

Y es que lo parecía ser una fiesta en el Puerto terminó convirtiéndose en pesadilla. Los verdes protagonizaron un furioso arranque de pleito, presionando en la salida del equipo albiceleste y encontrando rápidamente premio.

Recién a los 13', Marcelo Cañete propició una recuperación en campo rival, y tras una gran carrera por el sector izquierdo del ataque, Juan Ignacio Duma le dejó servido el balón a Diego Arias para hacer estallar a las más de 6 mil personas que dijeron presentes en Playa Ancha.

La fórmula se repitió a lo 23', cuando Duma se abasteció de una nueva equivocación en la gestación del ataque capitalino para habilitar a Andrés Vilches, quien definió en la entrada del área sobre la mala salida del golero Jorge Deschamps, y así colocar el dos por cero que ya parecía lapidario.

Pero lejos de caerse ante la desventaja en el marcador, Magallanes fue tomando cada vez más ritmo, y ayudado por el desprolijo funcionamiento caturro (que ayer mostró una de sus peores caras del año) terminó hallando los caminos para complicar a un débil Decano.

Quien comandó esta remontada fue Joaquín Larrivey, delantero que incluso fue contactado por la regencia porteña para vestirse de verde a principios de temporada, y quien a sus 39 años dejó loco a todo el bloque defensivo caturro.

El primero del experimentado artillero llegó a los 45', cuando recibió inexplicablemente solo en área wanderina para definir a contrapié de Eduardo Miranda y darle así un descuento a su equipo justo antes de que ambos conjuntos se fueran al descanso.

El Decano mostró todas las falencias habidas y por haber en el complemento, propiciando el empate del exjugador de Universidad de Chile a los 52', aprovechando un mal rebote del cuidametas local.

Salvo un par de remates sobre la portería, Wanderers nunca estuvo cerca de volver a ponerse en ventaja, y cuando ya se jugaban los descuentos, Miranda protagonizó otro garrafal error al controlar mal un balonazo de 40 metros y allí apareció otra vez Larrivey, que le terminó dando los tres puntos al conjunto carabelero.

No salieron del pozo

A juicio de Francisco Palladino, técnico caturro, "el empate hubiese sido más justo" producto de lo realizado por ambas escuadras. El uruguayo confesó además que "nos vamos con desazón por no haber podido sumar de a tres. El inicio fue prometedor, pero esto son más de 90 minutos y nos costó".

Según el análisis del charrúa, el desajuste en su escuadra ocurrió antes del primer descuento, y posteriormente "intentamos corregir en el entretiempo, pero energéticamente el equipo no salió de ese pozo en el que entró".