"Lo importante es que la gente lo pase súper bien y se muera de la risa"
Con una rutina diseñada para unir generaciones a través del humor, el comediante debutará hoy en la 54ª edición del Festival del Huaso de Olmué. En esta noche inaugural compartirá escenario con Diego Torres y Lucybell.
Ryoko Kanazawa - La Estrella de Valparaíso
El Festival del Huaso de Olmué 2025 dará inicio hoy y en el humor estará presente el comediante Ignacio Socías, quien reafirmó su vocación en 2011, cuando realizó un taller con Sergio Freire y dio sus primeros pasos junto a Felipe Avello.
El humorista llega al emblemático escenario de El Patagual después de más de una década de trayectoria. Con una rutina que ha sido probada exhaustivamente en escenarios de todo Chile y que ha demostrado conectar con públicos de todas las edades, compartirá la noche inaugural con Diego Torres y Lucybell. Su objetivo en el Festival es claro: hacer que las 5 mil personas presentes se rían de las dinámicas familiares y las diferencias generacionales, prometiendo un show que une a través del humor a jóvenes y adultos por igual.
-¿Cómo fue el día en que se enteró que sería parte del Festival del Huaso de Olmué?
-Me enteré a finales de octubre-noviembre. Fue intenso, porque yo entré así súper como por el conducto regular, si se puede decir de una forma. Me fueron a ver en julio y después no me pescaron; osea, no es que no me pescaron, estaban ocupados viendo otras cosas, porque es un equipo que ve muchas pegas. Entonces en un momento dije "ah ya bueno, quizás ya fue" y un día como de la nada fue como "sí, nos gustó, estás adentro". Teníamos en la oficina un cartel que decía "1 día sin saber de Olmué" y ya llevábamos como 30 días sin saber. Pero no, fue muy sorpresivo y muy esperado, más que sorpresivo.
-Ha dedicado más de 10 años al humor. ¿Cómo se siente al tener la oportunidad de participar por primera vez en un Festival, y especialmente en Olmué?
-Para mí es muy lindo, porque claro son más o menos como 10 años y la verdad es que el Festival del Huaso tiene esto de que es súper emblemático y es muy significativo para los comediantes, porque todos pueden ver tus rutinas en otros escenarios. Es súper desafiante, porque la gente le tiene mucho cariño al Festival y es el primero del verano, entonces abre la temporada y para mí es la idea de poder preparar un show especial para ese día, de adaptarme a lo que ese escenario requiere. Yo por mí actuaría hoy día, quiero puro actuar, quiero sentir a la gente, sentir al público de El Patagual. Yo he estado entre el público y es maravilloso para hacer comedia, es un escenario muy lindo para hacer comedia.
-¿Hacia dónde apuntará el contenido que presentará?
-Para mí, es poder reírnos de nosotros mismos como grupo humano, donde en una familia están los sobrinos, están los tíos y cada uno con su identidad se puede echar la talla y a cada uno le toca en algún momento del asado o de la mesa recibir y dar tallas. Siento que para allá va, reírnos de las relaciones de nosotros mismos en las familias, de cómo de repente los más jóvenes lesean a los más viejos, los más viejos lesean a los más jóvenes y de cómo, siendo distintos, hay un momento en donde uno puede sentarse a echar la talla y reírse. Para mí eso es hacia donde quiero apuntar.
- ¿Cuál diría que es su mayor temor o preocupación al enfrentar El Patagual?
-Mira, yo creo que temor propiamente tal son los temores que uno como comediante tiene ya de: "no me quiero tropezar con un cable, no quiero salir con el cierre abierto", como cosas medias catastróficas que uno piensa. Yo sé que igual Olmué es un público tradicional, pero es muy cariñoso y siempre ha tenido una actitud genial para el humor, y yo creo que si uno lo respeta y mantiene la buena onda y las ganas de hacer reír de verdad, es un público maravilloso. Yo, de verdad, en ese sentido siento que hay que ir bien preparado, con ganas de romperla, de que se maten de risa. Es un público que si uno está a la altura y te preparas y respetas en un escenario tan emblemático, ellos te respetan de vuelta, y eso tengo muchas ganas de sentirlo, de ver cómo caen los chistes.
-¿Cómo ha sido la preparación de su rutina?
-Yo creo que no hay otra forma que presentarse mucho, eso ha sido la preparación, en verdad. Llevo todo el año presentándome por lo menos tres o cuatro veces por semana en distintas partes. He girado, creo, de Iquique a Punta Arenas. En Arica justo hubo un problema con el casino, no pudimos arrendarlo, pero prácticamente todo Chile, el extranjero… Hemos probado en bares medianos, grandes, entonces creo que esa es la preparación por excelencia. No hay otra. Obviamente uno va pensando en hacer que calcen los tiempos, en algunos requerimientos, pero fuera de eso no hay otra preparación que presentarse muchísimo.
-Después de Olmué ¿Qué otros desafíos le gustaría enfrentar en su carrera?
-Tengo la cabeza puesta en que Olmué sea muy bacán, de pasarlo bien, de disfrutar con la gente de El Patagual y de ahí los desafíos nuevos vendrán después, porque ya estar en El Patagual, ya estar en la primera noche, para mí es una meta y un sueño cumplido, así que ahí lo veremos más adelante, lo importante es romperla y que la gente lo pase súper bien y se muera de la risa.
"Si uno se toma con humor cosas que a veces incluso pueden ser densas, uno se puede matar de la risa y de pronto todo es más liviano".
"Ya estar en El Patagual, ya estar en la primera noche, para mí es una meta y un sueño cumplido".