Vidriería Scheggia cierra su histórica sucursal en Valparaíso
Tras casi un siglo de funcionamiento en la calle Victoria, el local bajó sus cortinas por seguridad y traslado operativo a Viña del Mar. Dirigentes del barrio descartan inseguridad y destacan el trabajo comunitario.
Antonella Valverde H. - La Estrella de Valparaíso
Desde 1927, , la Vidriería Scheggia permaneció en la calle Victoria de Valparaíso, en un edificio de más de 500 m². Sin embargo, desde el pasado 30 de abril cerró sus puertas en la ciudad puerto, trasladando todas sus funciones a la sucursal de Viña del Mar y a su planta ubicada en Concón.
Gonzalo Román, gerente general de la Vidriería Scheggia, indicó el motivo del cierre de la sucursal de Valparaíso:"La verdad lo que gatilló un poco fue la inseguridad que teníamos nosotros en Valparaíso. Tampoco era solvente tener ese lugar donde las ventas cayeron mucho y el tema construcción. Hoy nosotros estamos muy dedicados a la construcción, entonces por ese lado tener dos sucursales de la envergadura que tenemos hoy en día, más una que nosotros tenemos la planta en Concón, eran tres, no era viable".
Román también explicó cómo ha impactado esto en las ventas de la sucursal de Valparaíso y en la reorganización interna de la empresa:"Las ventas habían caído al 50%. Entonces, por eso nosotros tenemos que reestructurar la empresa nuevamente para poder abarcar lo que hoy día estamos, o sea, para llevar estas dos sucursales, Viña y Concón, tuvimos que sacrificar la que menos vendía en ese momento que era Valparaíso, por el tema de seguridad, además, el tema de la logística que nos complicaba. Entonces, tener un lugar tan grande como Valparaíso manteniéndolo con las ventas que hoy día estaban ingresando no dan más".
El gerente general aclaró que la empresa no está en crisis y que el cierre no significa una quiebra:"Hoy en día que estamos reduciendo y estamos tratando de conservar claramente el nombre. Por ningún motivo estamos por quebrar, no está dentro de los números que vaya a quebrar la vidriera, más con todo el prestigio que posee... solamente es traslado".
Respecto a la clientela de Valparaíso, Román señaló que "fue una expectativa muy grande que al final se cumplió, porque dijimos, ¿Qué va a pasar con la gente que está en Valparaíso?, y efectivamente ha venido para acá, han seguido comunicándose con las vendedoras que están acá. Yo creo que para ellos es más menos problemático venir ellos para acá que el viñamarino vaya a Valparaíso. Nosotros acá no hemos perdido la venta... o sea, esos clientes siguen siendo fieles en este caso".
Por su parte, Ercilia Arias, integrante de la familia Scheggia, comentó que la "la vidriera sigue, los que sí ha sido bien penoso para la gente de la calle Victoria. Me han escrito muchas veces diciéndome: qué pena, que por qué, que sé yo. Esta vidriería fue la primera que se instaló en Chile en el año 1876, han pasado seis generaciones. Ahora hay socios y la vidriería continúa. El edificio es patrimonio, que es de la familia Scheggia".
Arias también valoró la historia familiar y el legado del negocio:"se ha ido traspasando de generación en generación, viene gente, dice: 'Ay, mi abuelita, mi mamá... Yo quiero trabajar con ustedes porque son prestigiosos. Tenemos un buen equipo de dueños, que se maneja muy bien".
Futuro de la vidriería
Desde la empresa informaron que entregaron oficialmente el local el pasado 9 de mayo. Ese día dejaron de trabajar completamente en Valparaíso, quedando el inmueble a resguardo de la familia Scheggia.
En la actualidad, la vidriería cuenta con una tienda en Viña del Mar y una planta en Concón. Allí, además de fabricar vidrios, espejos y marcos -como en sus inicios-, también producen ventanas de PVC, termopaneles, estructuras de aluminio, barandas vidriadas y shower door. "Todo eso es elaboración propia", señaló el gerente general.
"Estamos trabajando netamente y constantemente todos los días para tener una mejor venta y tener una mejor llegada hacia los clientes, el nombre ya está, ya por el nombre nosotros no nos quedamos", agregó Román.
Barrio victoria organizado
Laura Espinoza, presidenta de la Asociación del Barrio Comercial Victoria, San Ignacio y Simón Bolívar, se refirió al cierre de la vidriería, desestimando la inseguridad como motivo principal:"Cabe destacar que el cierre de la vidriería no tiene nada que ver con temas de seguridad, más bien es un problema interno entre socios y que por eso se genera el quiebre y el cierre de la vidriería. Es algo interno entre los socios".
Espinoza también defendió el entorno del barrio indicando que "es importante destacar que no tiene que ver con la seguridad... La seguridad de nuestro barrio es una de las más altas de Valparaíso. Contamos con cámaras y alarmas comunitarias. Nosotros, los locatarios, estamos súper unidos y trabajamos en constante comunicación con Carabineros. Hoy en día pertenecemos a un grupo de WhatsApp de seguridad. Si hay alguien que ve un sujeto peligroso, hacemos sonar la alarma, nos mandamos mensajes, nos estamos comunicando constantemente".
"Entonces, por eso uno puede caminar por la calle Victoria, San Ignacio y Simón Bolívar de manera tranquila, porque es uno de los barrios donde hay comunicación y coordinación por parte de locatarios, de seguridad privada y de seguridad ciudadana y Carabineros. Estamos siempre tratando de comunicarnos de manera efectiva", concluyó.