Judas del cerro Castillo cumplió 70 años de vida
Cada año, los vecinos del Cerro Castillo se preparan para juzgar y quemar al Judas. La tradición, que en esta oportunidad cumplió 70 años en el sector, atrajo a decenas de familias -y también turistas- que después de la misa de Domingo de Resurrección, se pasaron a las calles Callao y Balmaceda para participar del espectáculo.
Sin embargo, los más contentos eran los niños que a partir de las 12.00 horas, se subieron a una combi naranja a pasearse con el "traidor" y a gritar la clásica frase "una monedita para el Judas".
Victoria Castro, una de las organizadoras del evento, manifestó que la intención es que la costumbre siga traspasando generaciones. "Ésta es una tradición que empezó con Aldo Caimi (fallecido dirigente viñamarino). Mi papá Víctor Castro hacía la cabeza y un maestro de la familia el cuerpo. Hoy día el cuerpo lo hace el sobrino del maestro que se llama Daniel y la cabeza la hace mi hermano Miguel. Nosotros como familia nos hicimos cargo y espero que cuando mi hermano y yo no estemos, nuestros hijos sigan", apuntó la mujer.
Vestido elegante
Con el tiempo, el Judas ha ido variando sus looks, pero como ahora "cumplía años", fue vestido con un terno elegante. No obstante, ni eso le sirvió para salvarse de la terrible condenación que el juez le dio a vista de todos. "Buuuu, ¡que lo quemen, que lo quemen!", gritaban los presentes.
Finalmente, a eso de las 14.00 horas, el traidor fue quemado lentamente, llevándose consigo todos los "pecados" que los niños y adultos escribieron en papelitos. También los tristes recuerdos "o las cosas malas que no quieren que se repitan", como explicó Victoria Castro.
Luego los niños siguieron disfrutando de sus huevitos de chocolate y de las challas que los vecinos les regalaron. J